En una escuela de la localidad de Alto Comedero, Jujuy, a la que asisten menos de 200 alumnos, los cuales tienen entre 12 y 19 años, 30 chicas están embarazadas.

«Preguntamos a los directivos de todas las escuelas puntualmente por este tema. Muchos no quisieron responder, supongo porque se sintieron culpables de que esto pasara. Así que fuimos nosotros a hacer el relevamiento. Esta escuela tiene 30 chicas, y es el caso más alto, pero hay muchas estudiantes embarazadas en las escuelas», explicó Patricia Morales, responsable del Educación Sexual Integral (ESI) del Ministerio de Educación de la provincia.

Asimismo aseguró Morales, «En el Operativo Aprender, en la encuesta, el 80% de los estudiantes había pedido tener educación sexual. Y es lo que estamos tratando de hacer, de que llegue a todos y todas las alumnas de todos los niveles. Hay un gran apoyo político para que eso ocurra».

Explicó que la mayoría de los docentes se están capacitando y que disponen de los materiales. El equipo de ESI ya cuenta con 22 personas, «Si bien hay sectores que se oponen a la educación sexual, como los colegios privados religiosos, donde sí hay adoctrinamiento, no nos van a doblegar. Las escuelas están motorizadas en el buen sentido. Y más allá de la presión que está haciendo la Iglesia, tienen que entender que la educación es laica», consignó.

La responsable del Educación Sexual Integral del Ministerio de Educación de la provincia explicó que en base a los relevamientos que se terminaron de hacer en breve se anunciará la creación de salas maternales para que puedan ir los bebés de estas alumnas. «La idea es que las chicas no dejen de estudiar. Los chicos tampoco, porque varios de los padres son estudiantes también, de los mismos colegios. Aunque la mayoría son embarazos producto de violaciones y abusos intrafamiliares». Según datos oficiales de la provincia, se estima que el 60% de los abusos se da en el propio hogar.

La especialista en ESI insiste con el derecho de los niños, niñas y adolescentes a recibir educación y a estar informados. La Ley nacional de ESI tiene doce años ya. Pero hay padres que se oponen a este derecho con campañas como «No autorizo» o «Con mis hijos no».