Según cifras proporcionadas por la propia justicia argentina, en el año 2021 se contabilizaron 251 femicidios, entre ellos 5 trans-travesticidios, promediando un crimen cada 35 horas. Esto significaría un 13 por ciento menos de los registrados en 2020, pero todavía los números son negativos.
Este registro es llevado a cabo desde 2015 por una dependencia de la Corte Suprema de Justicia, el Registro Nacional de Femicidios de la Justicia Argentina realizado por la Oficina de la Mujer (OM).
Para confeccionar este relevamiento se tienen en cuenta las causas judiciales en las que se investigan muertes violentas de mujeres cis, mujeres trans y travestis por razones de género y aporta las cifras oficiales que se utilizan como referencia para la elaboración de políticas públicas.
La ministra de las Mujeres, Géneros y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta opinó que «por primera vez en la historia desde su creación, los números bajaron de un modo significativo: un 13 por ciento en relación al año anterior».
Según estos números, durante el 2021 se registraron 231 femicidios directos, provocando que 245 personas quedaran huérfanas -182 son niños, niñas o adolescentes-, mientras que el 62 por ciento (unos 152 casos) fueron llevados a cabo por la pareja o expareja de la víctima.
182 de los 231 femicidios directos, explicaron, se dieron en contexto de violencia doméstica. Hubo 20 casos en los que tuvieron lugar en una situación de violencia sexual o de trata de personas. Tres casos sucedieron en un contexto de discriminación por orientación sexual o de identidad de género.
Dentro de las características principales de las 231 mujeres asesinadas hubo 19 que tenían menos de 17 años. El promedio de edad fue de 37 años.
En lo que refiere a la interseccionalidad de las víctimas, precisó el informe, 12 mujeres asesinadas por femicidio eran migrantes, 7 se encontraban ejerciendo la prostitución, 6 estaban embarazadas, 5 vivían en situación de calle y 4 tenían una discapacidad.
Al menos se registraron 42 víctimas directas de femicidio que habían efectuado denuncias formales contra sus agresores, a la vez que en 81 vínculos se relevaron hechos previos de violencia que surgieron por otros medios a partir de la revisión de las causas judiciales, pero que no habían sido denunciados formalmente.
“En al menos 123 se presentaron hechos previos de violencia de género/doméstica entre la víctima y el sujeto activo de femicidio, esto es, en al menos 1 de cada 2 vínculos donde hubo un femicidio había antecedentes de violencia de género en el año 2021 en Argentina”, precisa el informe.
Con respecto a la conducta de los femicidas tras cometer el crimen, 43 de ellos se suicidaron, mientras que 18 intentaron hacerlo sin éxito.
Además, solamente el 11 de los 240 femicidas tenían antecedentes psiquiátricos.
Otro dato que destaca el informe es que 25 de los imputados formaban parte de una fuerza de seguridad, de los cuales 13 utilizaron sus armas reglamentarias para cometer el hecho.
Por su parte, el relevamiento precisa el 69 por ciento de los 231 casos de femicidio directo (155 hechos), aún se encuentra en investigación, el 13 por ciento (28 casos) están en juicio y el 3 por ciento (7 casos) ya tienen sentencia condenatoria, mientras que el 15 por ciento de las causas (34 casos) fueron archivadas.
En otro aspecto, la Corte contabilizó 20 femicidios vinculados, los cuales son definidos como ”aquellos homicidios cometidos contra una o varias personas, independientemente de su género, a fin de causarle sufrimiento a una mujer cis o a una mujer trans/travesti en un contexto de violencia de género”. De ese total, la mitad (10 casos) de los asesinatos fueron contra los hijos o hijas de la persona a la que se quería violentar.
A nivel general, si se tiene en cuenta solo las cantidades en números absolutos, en el 2021 el 32% de los femicidios directos (73 casos) de Argentina ocurrieron en la Provincia de Buenos Aires. Sin embargo, las provincias con mayor tasa de femicidios directos cada 100.000 mujeres fueron Chaco (2,43), Santiago del Estero (2,22) y Tucumán (2,07).
Al respecto, la tasa de víctimas directas de femicidio cada 100.000 mujeres en Argentina en 2021 fue de 0,99, lo que implica un leve descenso en comparación con los años previos: en 2017 fue de 1,11; en 2018, 1,14; en 2019, 1,11; y en 2020, 1,09.