Los ejecutores del atentado a la vicepresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner no habrían actuado solos, según informó una nota aparecida hoy en Página 12. En los días previos tanto como el mismo día jueves 1 de septiembre del atentado, se lo ve en filmaciones a otro integrante de la banda que ahora se conoce como los «copitos» por vender copos de azúcar en la zona. Se trata de Gabriel Carrizo, alias «Nicolás», que fue ubicado en el lugar y que desde hace días circula por los medios de comunicación dando testimonio del supuesto vínculo laboral que los unía.
La nota aparecida en ese diario, firmada por Irina Hauser y Raúl Kollman informa que Carrizo fue identificado en el lugar llevando un gorro y un barbijo el 28 de agosto. Además son varios días los que se constató la presencia del carro con copos de azúcar color rosa en las inmediaciones del departamento de Uruguay y Juncal donde vive Cristina Fernández.
«Su presencia fue detectada también el mismo día del ataque, camuflado con gorro y barbijo. Los otros amigos en la mira, a cuyos nombres accedió Página/12, son: Sergio Orozco, Leonardo Volpintesta, Miguel Angel Castro Riglos y Lucas Acevedo», dijo ampliando la información que se desprende de la causa.
El propio Carrizo en declaraciones televisivas reconoció que luego del atentado alojó en su casa a Brenda «Ámbar» Uliarte, pareja y cómplice de Sabag Montiel.
Otra información que se conoció en las últimas horas es que el día en que se produjo la represión por parte de la policía del gobierno de la Ciudad, el propio Sabag Montiel estaba presente a metros del gobernador Axel Kicillof.