Como publicó Chacabook, ayer por la tarde la ex mandataria Cristina Kirchner mantuvo una reunión con intendentes «leales». Según surgió de esa reunión la ex presidenta sería candidata a senadora por la provincia de Buenos Aires.

Finalmente la propuesta del kirchnerismo llevaría a Cristina como primera candidata a senadora, a Scioli secundándola y a Randazzo se le ofreció encabezar la lista a diputados.

Walter Festa, quien ofició de anfitrión para le reunión en Moreno, declaró “Ratificamos la conducción de Cristina Kirchner y tenemos la firme convicción de seguir trabajando por la unidad del peronismo”.

Para ser posible esta unidad, en el caso que Randazzo no acepte la propuesta, el kirchnerismo recurrirá a un artilugio legal cual hizo el PRO en la capital federal. Consistirá en inscribir la alianza con un nombre diferente, que podría ser Frente Ciudadano Para la Victoria y negarle de esa forma la primaria abierta a Randazzo, que le quedarían dos opciones. La primera recurrir a la justicia para que dictamine si puede o no competir en primarias. La segunda opción es ir por afuera, es decir, con una lista que no lleve el mismo nombre que la que encabece Cristina Kirchner.

El desenlace es tal vez el menos esperado para el tándem Randazzo-Domínguez, quienes se ven en una complicada situación entre aceptar los lugares que se le asignen en la lista o competir por su propia vía.

Otra cuestión a analizar es cómo repercutirá esto en la conformación de las listas en los distritos, ya que muchos de ellos, como Chacabuco tendrán primarias anunciadas entre más de un sector.