Ayer, el Subsecretario de Gobierno y candidato a concejal por Cambiemos, Mario Dicundo hizo polémicas declaraciones a De Hoy refiriéndose a la actualidad del peronismo en Chacabuco.

Luego de señalar el triunfo electoral en las primarias de Cambiemos, señaló que su espacio incrementó en tres mil votos el caudal electoral si se lo compara con 2015, mientras que Estévez había señalado lo contrario. Cuando el cronista le marca la diferencia de criterio de Estévez, Dicundo se despachó «la preocupación que debería tener el concejal Estévez es por los votos que ha sacado su candidato, que no sé si es Martín Carnaghi o Marcos Merlo«.

Siguiendo las declaraciones a De Hoy, Dicundo agregó «habrá que ver si el 17 de octubre el justicialismo de Chacabuco va a conmemorar el Día de la Lealtad, porque hasta los propios candidatos que acompañan a Merlo están diciendo que van a cortar su propia boleta y que no vana a acompañar a Florencio Randazzo».

Ante esto, el candidato de Cumplir-PJ Marcos Merlo le salió al cruce con un comunicado de prensa. «El Subsecretario Dicundo, en lugar de opinar sobre el corte de boletas en el peronismo, sería mejor que le explique a la comunidad quién fue el funcionario que autorizó a descargar en el Corralón  más de 50 camiones de una piedra de muy inferior calidad a la comprada por el Municipio -sostuvo Merlo-. Para distinguir la piedra partida de la piedra de descarte no hay que ser ningún experto. Soy médico y sé que a simple vista se observa la diferencia una piedra de la otra».

Recordando así el caso de las piedras que dividió las aguas en el oficialismo y que aún no ha sido aclarado a la comunidad. «No es bueno que el gobierno se meta en la vida interna del peronismo«, insiste el comunicado, «mejor que se preocupen por darle transparencia a la compra de la piedra porque entre una calidad y la otra hay una diferencia de más de 2 millones de pesos. Por eso, es preciso saber quién fue el funcionario que autorizó descargar tamaña cantidad de piedras».

Merlo finalizó expresando «lo más triste de toda esta comedia es que se perjudica el Municipio, los vecinos que deberán seguir esperando y los transportistas que se encargaron del flete de la piedra en cuestión«.