(GACETILLA DE PRENSA)
Chacabuco, capital nacional del maíz, se prepara para celebrar su tradicional fiesta.
Del jueves 28 de septiembre al domingo primero de octubre, la ciudad de Chacabuco estará de fiesta. Cuatro días que prometen recuperar la verdadera esencia de la “Fiesta Nacional del Maíz”, un evento que no se lleva a cabo desde el 2013.
Tras el anuncio, el intendente municipal, Dr. Víctor Aiola, destacó la importancia que hay detrás de esta semilla protagonista, como es el maíz. “Una fiesta nacional que para nosotros es parte de nuestra identidad como chacabuquenses”, señaló.
La fiesta revaloriza el trabajo de los productores agrícolas y esta cuadragésima celebración tiene como finalidad revivir la experiencia de aquella tradición que nació en los años setenta.
Zona maicera por excelencia, Chacabuco se ha convertido en un punto de encuentro donde el campo se traslada al centro de la ciudad. Con la presencia de instituciones de renombre, disertantes de destacada trayectoria, empresas, productores locales, gastronomía, peñas folclóricas y shows en vivo representados en un solo lugar.
Selección de la Reina Nacional del Maíz y de los “Granitos de Maíz”, las figuras más esperadas y broche de oro del gran evento.
Ariel Di Piero, informó sobre los espectáculos de artistas confirmado: el viernes se presentará Javier Calamaro, el sábado Facundo Saravia, y el domingo se culminará la fiesta con el show de Agapornis. Además sobre los sectores en los que se llevarán a cabo las distintas actividades, la plaza San Martín y sus calles laterales, como así también la primera cuadra de la avenida Alsina.
“Nosotros no solamente tenemos que poner en marcha un Estado desde el punto vista de obras públicas, salud; de rutas que estaban totalmente destruidas, sino que también tenemos que poner en valor a las instituciones y en este caso volver a tener esa identidad que tenía Chacabuco a través de esta fiesta tan importante”, manifestó Aiola.
Para la gestión municipal, era un objetivo a cumplir este año. Una fiesta que forma parte de la identidad de todos los vecinos y que hacía cuatro años que no se realizaba, situación que viene acompañada de los últimos doce años de desidia y de pérdida de valores.
