Juan José García es investigador de la Comisión de Investigaciones Científicas (CIC) perteneciente al Centro de Estudios Parasitológicos y de Vectores (Cepave) y estudia el problema del barigüí o mosquita, como muchos la denominan.
Este insecto ha causado enormes problemas para muchas comunidades ya que en algunos casos se presenta en grandes cantidades. Se caracteriza por morder, en vez de picar como los mosquitos, y las lesiones que produce generan inflamación, que en algunos casos como en los alérgicos pueden causar graves problemas.
El programa La Mañana de UNNOBA Radio, que conducen Luciano Toledo y Sofía Sarazola, entrevistó a García quien explicó la expansión del fenómeno y lo que puede hacerse desde los gobiernos para combatirlo.
«El problema está instalado desde el 2000», contó García, quien recordó que durante 2003 se realizaron ya las primeras reuniones en las que participó.
En su perspectiva, la coordinación de las tareas municipales debe ir acompañada por el uso de alternativas biológicas para combatirla y no hacerlo mediante químicos. Propone la utilización del Bacillus Thuringiensisde, una bacteria que funge como alternativa biológica al plaguicida.
«Lo que hay que hacer es empezar a tomar acciones coordinadas entre la provincia, los municipios. En mi opinión todos los municipios tienen que trabajar coordinadamente implementado medidas de control a corto, mediano y largo plazo con utilización de Bacillus Thuringiensis para combatir las larvas y en los casos de excesos, de altas densidades, los intendentes pueden aplicar algún piretroide que logre el volteo rápido para que la gente no esté sujeto a semejante presión de picaduras», explicó el especialista a UNNOBA Radio.
Con ese método, contó el investigador, se «logra la mortandad en un 100 por cien de la larva», estadio del desarrollo al que hay que apuntar para su combate. Y desaconsejó el uso de productos químicos: «No tiene mucho sentido empezar a gastar en productos si no se tiene la información básica».
Sobre los plazos y las posibilidades de solucionar el problema del barigüí, opinó que «para tener una solución como corresponde hay que esperar por lo menos al mediano plazo». Y explicó que es optimista con respecto a su solución porque en otros países se ha logrado.
E insistió sobre el punto de combatir con métodos biológicos para que el barigüí no genere resistencia agravando el problema. «Las poblaciones desarrollan resistencia, ustedes siempre van a matar el 95%, pero ese 5% es resistente y esos van a tener descendencia que ya va a ser resistente, después todos van a ser resistente a esa familia de insecticidas que utilizan, lo único que hacen es agravar el problema. Eso es lo que pasa con los químicos, no hay que abusar», sostuvo.
Y finalizó planteando «No tengan duda, que esto tiene solución, tenemos que trabajar ordenadamente».
