Justina perdió la vida luego de una larga espera por un corazón, en noviembre de 2017. Impulsados por los acontecimientos en sus vidas y el espíritu de Justina, sus padres lanzaron un proyecto de ley para mejorar el proceso de donación de órganos.

El proyecto de ley fue presentado en el Congreso de la Nación conjuntamente con el senador Juan Carlos Marino y ya ingresó al Senado.

La «Ley Justina» pretende modificar la actual ley de trasplantes. Con este cambio todos los mayores de 18 años serán considerados donantes.

De esta manera, se acelerarían procesos, ya que no sería necesario consultar a los familiares si se desean donar los órganos de la persona fallecida.

Contrariamente a lo que existe actualmente, con este nuevo proyecto, se haría un registro de No donante. En caso que la persona no quiera ser donante, deberá quedar explícitamente establecida su voluntad.

Además, se le asignaría un 20% del Fondo Nacional del Trasplante para la formación y capacitación específica para procuradores, enfermeros y médicos.

El proyecto ya cuenta con el apoyo de varias fundaciones y ONGs, además de médicos especialistas, personas en espera de trasplante y familiares.