(Comunicado)

La excusa de la «pesada herencia» parece ya un discurso gastado; Cambiemos la ha usado sistemáticamente durante más de dos años y medio. Cada vez que el presidente tiene que enfrentar la inflación, que la gobernadora tiene que justificar un ajuste en la provincia o que el intendente Aiola tiene que rendir frente a los chacabuquenses sobre alguna cuenta poco clara de su gestión, apelan a justificarse denunciando al gobierno anterior.

La realidad es que el desastre económico al que nos han empujado endeudando innecesariamente al país, demuestra una falta total de iniciativa y creatividad. Intentan pagar deudas que ellos mismos generaron, pidiendo nuevamente dólares prestados que generan nuevos intereses en un verdadero círculo vicioso. Y cuando surge algún inconveniente, en lugar de buscar una estrategia que lo revierta, siguen con el mismo modelo y cargan contra el peronismo echándole la culpa de su propia incapacidad.

Como no podía ser de otra manera, cuando surgieron aportantes truchos en Chacabuco, la UCR chacabuquense se limitó a atacar al peronismo hablando de la causa de la efedrina, una operación política en la que acusaron al peronismo de financiarse con esta droga, causa que judicialmente quedó en la nada, pero que sirvió para golpear arteramente desde los medios a uno de nuestros candidatos a horas de las elecciones.

Típica actitud de Cambiemos, hablar del pasado sin hacerse cargo del presente. En lugar de continuar con este desgastado argumento, deberían asumir la responsabilidad de sus errores y reconocer que el haber declamado en campaña que venía a gobernar con honestidad hoy se les ha vuelto en contra.

Todavía no han explicado qué ocurrió con el dinero de las motos que vendieron a un desarmadero, ni con el pago de sobreprecios en las luces LED que le compraron a la empresa española que nunca instaló la fábrica prometida por el intendente. Además se llevaron la tierra del predio del sector industrial y dejaron un pozo donde antes había tierra negra. Aún nada se sabe sobre las piedras que pagaron como de primera y eran de tercera; ¿dónde está el dinero de la diferencia? Tampoco qué ocurrió con el pago adelantado a la cooperativa La Fortaleza por un trabajo que aún no se realizó. Podrían explicar también por qué a meses de inaugurarse calles de asfalto ya están rotas, o qué llevó a que uno de sus funcionarios quisiera incentivar con recursos del estado al presidente de un club local para que votara al candidato a presidente de la Liga Deportiva que Cambiemos quería (claro intento de cohecho). En fin, es hora de dar explicaciones por su propia gestión y dejar de buscar culpas en los que ahora somos oposición y vemos cómo meten a la Argentina en una tormenta que se hace cada vez más larga.

Partido Justicialista de Chacabuco