Omar Cricco, un vecino de la localidad de Carhué, publicó preocupado una carta denunciando que un hombre habría violado a un gato que suele visitar su domicilio. La mayor preocupación basada en los niños de la zona que corren peligro.
En el inicio relata, «A nuestra casa suele venir a comer un gato, que a pesar de tener dueño, le gusta recorrer el barrio. Come al igual que los nuestros, productos balanceados, le preparamos un lugar al reparo para los días de lluvia o frío. Lo hemos hecho desparasitar, cuando fue la campaña de vacunación antirrábica se la hicimos aplicar, lo han visto en más de una oportunidad dos veterinarios locales que pueden dar fe de ello».
El texto continúa diciendo, «Habíamos pensado en llevarlo a castrar pero, al no ser sus propietarios, nos pareció incorrecto. Faltó hace un mes por varios días y luego vino muy flaco, deteriorado y con signos de haber sido maltratado. Tenía su cola lastimada, que días después terminaron cortándole un pedazo. Y lo más grave es que tiene su esfínter exterior lastimado, signo de que le deben haber introducido algo«.
«No podría llamar humano a este ser que, si hizo lo relatado, temo que pueda hacerlo con algún niño/a. El sector donde deambula es entre las calles Moreno y Lonardi. Solemos lamentar los hechos una vez producidos, quiero alertar con esto que hay un ‘depredador insensible’ suelto, puede ser producto de alguna adicción, alcohol tal vez», finalizó con su exposición del caso el vecino de Carhué.