La Posta entrevistó al secretario de Desarrollo Social, Juan Cruz Magdalena quien dio detalles acerca de las acciones que realiza la dependencia que conduce frente al deterioro económico que alcanza a trabajadores como jubilados, mientras amenaza a quienes más dificultades tienen para llegar a fin de mes.
Según explicó desde que tomó la conducción del área se enfocaron en fortalecer lo que es el trabajo territorial, a través de la coordinaciones en los diferentes CICs, y en la creación de la Dirección de Niñez y Adolescencia que ahora coordina todos los programas de la órbita.
«Estamos abiertos a recibir a todo aquel que tenga una necesidad, todo aquel que tenga ganas de sumarse, en cuanto a dar una mano a la población. Sabemos que estamos en un momento bastante difícil, y por eso queremos trabaja codo a codo con quien sea», dijo Magdalena sobre Desarrollo Social.
Y agregó que «acá no hacemos ‘política de desarrollo’. Desarrollo social no hace política, y por eso mi oficina está abierta a todo el mundo. Lo pueden decir referentes de la oposición que yo recibo a todo el mundo, no tengo ningún inconveniente».
-¿Hoy en día cuantas personas asisten? ¿Tenes algún numero o estadística?
-Tenemos un promedio de 1200 personas por mes en lo que es los Centros de Gestión, que en realidad son personas que se repiten, no son personas nuevas.
-¿Cómo asisten a esas personas?
-En realidad nosotros con lo que estamos trabajando mucho es con todo lo que es el ingreso a los planes sociales, la tarjeta Plan Más Vida, pensiones o tarifa social. También estuvimos acercando las garrafas a los barrios, tratamos de facilitar la llegada de 
los envases de garrafa. Frente al reclamo de los vecinos con respecto a las tarifas, incorporamos la gestión a la tarifa social, y después la asistencia que se venía realizando, que es la ayuda para alquiler, para viajes, para alimentos, con bolsines de alimentos que implementó esta gestión.
-En perspectiva, ¿ha aumentado la demanda? ¿Eso cómo se vienen viendo?
-La verdad, los últimos meses se ha sentido, más que nada nosotros creemos primero por el aumento de las tarifas. Tenemos que ser realistas y reconocer que el aumento de las tarifas impactan en los que menos tenemos, en la clase media, y en los más humildes, y realmente eso se siente, y más en invierno. Es algo que nos tiene bastante preocupados. Víctor lo dice todo el tiempo, y nosotros venimos trabajando como para subsanar esa situación, por lo menos en Chacabuco, que es donde nosotros tenemos injerencia. La gente, las personas tienen distintas prioridades, tal vez vos no lo ves en cuanto a que no pueden pagar el alquiler, pero lo ves en cuanto a que no pueden pagar el gas. Entonces, tratamos de cubrir las necesidades de todos, por lo que decirte ‘hoy tenemos más demanda por una cosa o por otra’ sería mentir, o sería faltar a la verdad porque en realidad lo que estamos haciendo es analizando todo el panorama. Lo que si no creció, o no creció como se trata de decir es la demanda por alimentos. Nosotros vemos que sí ha crecido la demanda por las tarifas y por la devaluación que hubo, pero no creció en gran porcentaje la demanda por alimentos.
-¿Qué mirada tienen ustedes de esta realidad? Tanto a nivel país como en Chacabuco específicamente
-Creo que para hablar de la situación actual hay que hablar también un poco del pasado. Nosotros cuando empezamos a caminar con Víctor hace cuatro años, allá por el 2014 veíamos situaciones en los barrios que para aquel que vive dentro de las cuatro avenidas 
tal vez no lo ve, situaciones en los barrios que decís esto en Chacabuco no existe y la verdad que sí existe y nos pusimos como objetivo cambiar esa realidad. La verdad que es muy difícil, pero estamos trabajando para eso. Después, la coyuntura del país, la situación actual te lleva a que muchas de esas cosas no se puedan terminar de realizar en el tiempo que uno desea y que se vaya retrasando un poco. Sin embargo se han hecho un montón de obras en cuanto a lo que es los barrios, los servicios. En cuanto a desarrollo en sí, yo creo que el «desarrollo social» implica muchas cosas. Implica el acercamiento a la gente, implica el cambiar la forma de vida. No es solamente llevar un bolsín o dar un subsidio, sino el cambiarle la forma de vida, por eso cuando con Mabel Unsain implementamos la creación de los Centros de Gestión la idea era esa: tomar directamente de los vecinos, en los barrios, la problemática y poder resolvérsela ahí mismo. No tener que acercarse al centro, sino estar presente en los barrios. Y creo que es algo que nosotros tenemos muy en claro desde el primer día. No sirve tener una oficina centralizada en el medio del centro, cuando los problemas los tenés en Los Misioneros, en el Alcira, en Las Palmeras… La verdad que eso para nosotros no sirve.
