Un abogado y ex militar mencionado en las causas del triple crimen de General Rodríguez y la mafia de los medicamentos se resistió a los tiros a un asalto con dos motochorros que le robaron una mochila con 50.000 dólares y documentos, en pleno microcentro porteño, y mató a un cerrajero ajeno al hecho que caminaba por el lugar, informaron fuentes policiales y judiciales.

El letrado, identificado por las fuentes como Silvio Guillermo Martinero (45), quedó detenido por orden del juez de instrucción 13, Luis Zelaya, quien lo dejó imputado por homicidio simple con dolo eventual y mañana lo indagará en el Palacio de Tribunales.

El hecho ocurrió a las 9.20 en San Martín al 500, entre Tucumán y Lavalle, cuando el abogado fue asaltado por dos delincuentes que iban en una moto, le arrebataron una mochila en la que llevaba unos 50.000 dólares y documentos y se resistió a tiros con una pistola Glock calibre .40 de su propiedad.

Si bien en un principio fuentes policiales sindicaron que el muerto era un delincuente que había actuado en complicidad con dos motochorros que lograron escapar, con el correr de las horas los investigadores determinaron que el fallecido, Daniel Fernando De Negri Rodao (56), de nacionalidad uruguaya, no estaba vinculado al asalto y era empleado de una cerrajería ubicada a la vuelta del lugar del hecho.

«La confusión se dio porque el propio abogado le dijo a los policías que el muerto estaba con los motochorros y eso era falso», dijo a Télam un jefe policial.

La prueba clave es un video de una cámara de seguridad de la Casa de Cambio y Agencia de Turismo Pasamar S.A. que ya se encuentra en poder de los detectives de la comisaría 1ra. de la Policía Federal de la ciudad y que ya fue visualizado en el juzgado de Zelaya.

En las imágenes -difundidas por distintos canales de televisión- se observa claramente como una moto con dos hombres sale a toda velocidad por San Martín y detrás se ve corriendo a Martinero, de traje y corbata, con un maletín en una mano y el arma en la otra.

Los testigos contaron que se escucharon entre cinco y seis disparos y en el video se puede observar cómo el cerrajero De Negri, que caminaba por la vereda de enfrente, cae alcanzado por un disparo en la espalda cuando queda en la línea de tiro y la moto de los ladrones le pasa por al lado.

Un abogado defensor que dijo representar a Martinero contó luego a la prensa que el episodio ocurrió cuando el hombre llegaba a su oficina y que fue abordado por los delincuentes que le apoyaron un arma en la cintura.

«Por lo que él me cuenta, teme por su vida porque además de arrebatarle la mochila, le apoyan un arma en la cintura», dijo Leandro Rombolá, quien agregó que «la legítima defensa existió».

El titular del Sistema de Atención Médica de Emergencias (Same), Alberto Crescenti, informó a Télam que la ambulancia arribó al lugar a las 9.26 y que el cerrajero ya estaba fallecido.

Crescenti indicó que al ser revisado, el hombre tenía «un único disparo de arma de fuego en la región torácica». En principio, la Policía ya constató que el letrado es legítimo portador de armas y tiene los papeles de la pistola Glock en regla.

El tránsito y la circulación peatonal quedaron cortados durante algunas horas por los trabajos periciales de la Unidad Criminalística Móvil y el de los forenses que retiraron el cadáver hacia la morgue judicial.

 

Además de ser abogado, Martinero es un ex militar vinculado a las «cuevas financieras» y que está mencionado en causas relevantes como la del triple crimen de General Rodríguez -en la que asesinaron a los empresarios

Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina-, y a la mafia de los medicamentos, según indicó el abogado Miguel Ángel Pierri.

«En esas causas judiciales se mencionan las mesas de dinero de Martinero. Sebastián Forza le tenía mucho miedo y respeto», dijo a Télam el penalista que actúa como querellante en el expediente del Triple Crimen.

Pierri también contó que Martinero «fue a declarar al juicio que se hizo en Mercedes por el triple crimen y «allí dijo que tenía una excelente relación con Forza, algo que sabemos que era mentira porque Forza le debía dinero y le temía».

Por otra parte, Gabriel, uno de los empleados de la Cerrajería Integral Centro, para la cual trabajaba el cerrajero asesinado contó que al momento de ser baleado el hombre iba a encontrarse con él y que se dio cuenta de que algo le había sucedido cuando vio que tardaba en llegar y vio las fotos del herido en las redes sociales.

«Él era mi amigo y mi compañero. Trabajaba en la zona del microcentro desde hacía 30 años y también hacía trabajos para nosotros, de acá de la cerrajería», contó a Télam Gabriel.

«Justamente Daniel venía a encontrarse conmigo por un trabajo que teníamos que hacer. Cuando escuchamos disparos primero pensamos que eran cohetes, porque había una marcha, pero cuando empezaron a decir que había sido un asalto empecé a dudar y me llamó la atención que él se demorara y no llegara», añadió el compañero de la víctima.

FUENTE: TÉLAM