Macri arribó ayer a Washington para participar de la Cumbre de Seguridad Nuclear.
Además de dar un discurso ante el plenario de la cumbre, el Presidente tiene previsto reunirse con su par de China, Xi Jinping. Por la tarde se verá también con el premier de Japón, Shinzo Abe.
El encuentro entre Macri y Xi es en el hotel Omni Shoreham, situado en plena ciudad y rodeado de un fuerte dispositivo policial por las protestas de los disidentes chinos.
Con el jefe de Estado participan también la canciller, Susana Malcorra, y el embajador argentino en Estados Unidos, Martín Lousteau, entre otros.
Macri destacó que:
Será importante ratificar la alianza estratégica con China, pero a la vez plantear que los acuerdos que se lleven adelante deben ser transparentes y beneficiosos para el país.
Se refería, en efecto, a los convenios firmados por el gobierno anterior que contemplan varios errores técnicos, irregularidades y secretismo en lo que hace, por ejemplo, la construcción de las represas Jorge Cepernic y Néstor Kirchner, con financiamiento de Pekín, en la provincia de Santa Cruz.
En China no piensan lo mismo que Macri. Hace una semana, el vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Hong Lei, dijo que los acuerdos firmados con la Argentina son «abiertos, transparentes y alineados con las leyes».
A la vez, hay objeciones del Gobierno en cuanto a los acuerdos relacionados con la construcción de dos centrales nucleares, porque se darían con tecnología mixta, lo que la actual administración argentina no ve como algo ideal.
Ante el plenario de presidentes sobre seguridad nuclear, Macri hará una fuerte defensa del trabajo que viene haciendo la Argentina en material de energía nuclear con fines pacíficos y destacará los trabajos que vienen hacienda el Invap y la Comisión de Energía Atómica que ayer recibieron los Innovation Awards.