La ciudad de Pergamino está siendo atravesada por un problema que preocupa a todos los habitantes y que no es la única ciudad en la que pasa.
Ante la gran presencia de arsénico y agroquímicos en el agua, los habitantes de esa ciudad han comenzado a preocuparse tras conocerse análisis.
Hace unos meses, se abrió una causa judicial y a través de un estudio se constató la presencia de alrededor de 18 tipos de agroquímicos en el agua.
A raíz de esto, se pidió analizar también el nivel de arsénico y los resultados fueron más preocupantes: del cien por ciento de las muestras, todas presentan un nivel de arsénico nueve veces por encima de lo permitido.
Ahora, las «Madres de Barrios Fumigados» de Pergamino, quienes realizan denuncias y protestas en la ciudad sobre las fumigaciones en cascos urbanos, llevarán a cabo una marcha para exigir «Agua sin venenos» en Pergamino. La marcha será hoy lunes a partir de las 15:00 horas en la Plaza 25, y caminarán hasta Plaza Merced.
En la ciudad de Chacabuco, también el arsénico y la contaminación del agua son temas de debate, y todavía no se concoen los valores.
Hace poco, el tema volvió al centro de la escena cuando la concejala Rodríguez Juliá aseguró que el agua no es apta para consumo humano. Si bien es un problema natural que afecta a toda la región del interior pampeano, no deja de preocupar a la sociedad.
Algunos optan por adquirir filtros para evitar consumir arsénico, mientras que otros compran aguas minerales o retiran el agua que ofrece la planta de ósmosis inversa.
Hace poco, la directora de Obras Sanitaria, Sandra Vita, explicó a La Posta, que los valores son los mismos, la única alternativa por el momento es abrir más plantas de ósmosis.
En Chivilcoy, en mayo de este año un fallo de Cámara obligó a ABSA a construir una planta de ósmosis y garantizar los niveles de arsénico como pide la Organización Mundial de la Salud.