(Publicación pedida)
El pasado martes 24 a las 19 hs. los legisladores provinciales de Juntos Por El Cambio recibían el proyecto de ley “Impositiva 2020” para tratar en sesión extraordinaria el siguiente jueves 26 por la tarde pretendiendo aprobar en tiempo récord una normativa tan pero tan importante.
La semana anterior, a solicitud del gobernador ya se le había aprobado la prórroga del presupuesto vigente hasta marzo del año próximo, así como también diferentes emergencias, incluso el pliego del presidente del Banco Provincia, lo que significa haberle brindado las herramientas necesarias al nuevo gobernador para comenzar a gestionar la Provincia.
Esta vez, el proyecto que pretendían aprobar de forma express, contemplaba aumentos del 75% del impuesto inmobiliario rural y urbano a más de un millón seiscientos mil bonaerenses con un revalúo oculto de todas las propiedades de alrededor del 70% golpeando los bolsillos de estos bonaerenses.
A este impuestazo los legisladores provinciales de Juntos Por El Cambio solicitaron que este porcentaje fuera de entre el 50 y el 55% teniendo en cuenta la inflación de este año y no la del año próximo que sería aún menor.
Al cuidar a los bonaerenses el oficialismo le llama extorsión, al cuidar a los bonaerenses el oficialismo le llama desestabilización, no es el sendero que decidimos caminar, elegimos el del consenso y el del diálogo brindando las herramientas suficientes al gobierno provincial pero no podemos permitir que ahoguen las cuentas de las y los bonaerenses.
Cabe mencionar que a través de la suspensión del pacto fiscal, a través del cual los últimos años fue disminuyendo la presión impositiva, por la baja del impuesto a los Ingresos Brutos, esto se revierte aumentándose por ejemplo un 133% el impuesto a la producción de medicamentos o de un 75% a los servicios profesionales.
Mintieron durante toda la campaña cuando decían que iban a disminuir la carga impositiva ya que a través de este proyecto buscan aumentar los ingresos brutos, el impuesto a la transmisión gratuita de bienes, el impuesto a los sellos, el valor de las tasas administrativas y un aumento indirecto para los automotores.
La vocación de dialogo existe desde el momento en que se acepta tratar una ley impositiva sin su debido presupuesto de gastos, desconociendo a donde será destinada la recaudación de impuestos.
Pareciera que el oficialismo solo ve mal el aumento de impuestos cuando es oposición pero a la hora de gestionar el único recurso que conocen es el de ahogar al vecino con mayor presión impositiva.
UCR – Comité ALEM – CHACABUCO
