El medicamento misoprostol se viene utilizando desde hace años para lograr interrupciones voluntarias del embarazo, a pesar de que en realidad sólo estaba aprobado para tratar trastornos gástricos. Pero ahora, se autorizó su venta en farmacias para uso ginecológico.
La Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (Anmat) ya había aprobado en agosto el proyecto del laboratorio Domínguez para producir misoprostol sin agregado de diclofenac y para administración por vía vaginal. Sin embargo, en ese momento, se había limitado su distribución únicamente a hospitales.
Ahora la resolución de la Anmat habilitó al Laboratorio Domínguez a producir misopostrol con fines ginecológicos y comercializar el producto en todas las farmacias del país. Se estima que la medicación estará disponible para la venta al público, con previa presentación de receta archivada, antes de finales de 2018.