En el «Día Mundial de la Diabetes», la secretaría de Salud en conjunto con la subsecretaría de Deportes y el CEF Nº 20, organizaron una serie de actividades que se desarrollaron por la mañana del miércoles en las instalaciones del Centro de Educación Física y al aire libre en la plaza General Paz.
El acto de apertura estuvo a cargo de integrantes del Servicio de Endocrinología, Metabolismo y Diabetes del Hospital Municipal «Nuestra Señora del Carmen». Luego, se realizó una caminata y actividad aeróbica musical en la plaza.
También había una mesa saludable donde se brindaron consejos y recomendaciones. Además, en la carpa de Salud, la comunidad en general accedió a la medición de glucemia -azúcar en sangre- con tiras reactivas.
La directora de Salud, Yesica Berterame, puntualizó en la importancia de crear concientización, disminuir los factores de riegos y educar al paciente. «Un gran porcentaje de la población se desconoce diabética porque no está diagnosticada», informó.
Y agregó, «el paciente si o si tiene que tener controles, dos veces al año, para no llegar a las complicaciones de la diabetes».
«La diabetes es una enfermedad que se hacer sistémica, que da muchas discapacidades y que cuando el paciente comienza a tener síntomas ya está avanzada», consignó Berterame.
En tanto que, Milagros Marveggio, subsecretaria de Deportes, señaló que la actividad física es fundamental en relación a la enfermedad de la diabetes. En ese aspecto, recordó los programas deportivos de Adultos Mayores y 30×30 “Chacabuco se Mueve” que promueven el hábito de realizar actividad física.
Además estuvieron presentes, la directora asociada de la Región Sanitaria III, Romina Sclavi, y el secretario de Salud, Julián Serritella.
Familia y Diabetes
La Federación Internacional de Diabetes (FID) ha anunciado recientemente que el “Día Mundial de la Diabetes”, se centrará en «La familia y la Diabetes», en un período de dos años (2018/2019).
La campaña tendrá como objetivo aumentar la conciencia del impacto que la diabetes tiene en la familia y la red de apoyo de los afectados; y promover el papel de la familia en la gestión, cuidado, prevención y educación de la diabetes.
Más de 425 millones de personas viven actualmente con diabetes. La mayoría de estos casos son diabetes tipo 2, que en gran parte se puede prevenir mediante la actividad física regular, una dieta sana y equilibrada y la promoción de entornos de vida saludables. Las familias tienen un papel clave que desempeñar al abordar los factores de riesgo modificables para la diabetes tipo 2 y deben contar con educación, recursos y entornos para vivir un estilo de vida saludable.
Una de cada dos personas que actualmente viven con diabetes no está diagnosticada. La mayoría de los casos son diabetes tipo 2. El diagnóstico y el tratamiento tempranos son clave para prevenir las complicaciones de la diabetes y lograr resultados saludables. Todas las familias se ven potencialmente afectadas por la diabetes y, por lo tanto, el conocimiento de los signos, síntomas y factores de riesgo para todos los tipos de diabetes es vital para detectarlo temprano.
La diabetes puede ser costosa para el individuo y la familia. En muchos países, el costo de la inyección de insulina y el monitoreo diario solo pueden consumir la mitad del ingreso disponible promedio de una familia, y el acceso regular y asequible a medicamentos esenciales para la diabetes está fuera del alcance de muchos. Por lo tanto, es urgente mejorar el acceso a medicamentos y cuidados asequibles contra la diabetes para evitar mayores costos para el individuo y la familia, que tienen un impacto en los resultados de salud.
Menos de uno de cada cuatro miembros de la familia tienen acceso a programas de educación sobre la diabetes. Se ha demostrado que el apoyo familiar en el cuidado de la diabetes tiene un efecto sustancial en la mejora de los resultados de salud para las personas con diabetes. Por lo tanto, es importante que todas las personas con diabetes y sus familias tengan acceso a la educación y el apoyo continuo en materia de autocontrol de la diabetes para reducir el impacto emocional de la enfermedad que puede dar lugar a una calidad de vida negativa.