El pasado viernes el intendente local participó del acto oficial por el Día de la Diversidad Cultural, cuya celebración apunta a fortalecer la pluralidad cultural y alejarse de las ideas que centran la mirada en la culturas dominantes.
Durante el acto caía una intensa lluvia que no pasó desapercibida. Con la mirada del intendente atenta, en medio del acto una importante filtración de agua obligaba al personal auxiliar a trabajar continuamente secando un gran charco.
Los niños que debían bailar para alegrar el acto se vieron complicados por el piso mojado. El charco también a su manera protagonizó el acto.
Pero también el intendente mostró una vez más el sesgo ideológico y casi discriminatorio que lo ha caracterizado en varias oportunidades.
Allí se refirió a las diferentes culturas como «razas». Cuando utilizó la palabra muchos apretaban los dientes antes el despropósito del jefe comunal, que luego su prensa difundió sin percatarse.
Así expresó Aiola en el acto: «Si hay algo que a nuestro país lo hizo grande fue la diversidad cultural. La diversidad de pueblos que lo integran, de razas que vinieron y siguen viniendo a nuestro país. Festejemos este día, pero sobre todo reflexionemos entre todos para tener un país mucho mejor».
La utilización de este término, explican los especialistas, es una forma más de racismo y xenofobia. Ya que genéticamente no existe algo como raza. El término no designa una realidad sino una construcción ideológica con la que se pretende hacer creer que existen diferencias biológicas entre las poblaciones del mundo.
El intendente ya ha tenido expresiones de similar índole, por ejemplo, cuando en un locro radical en el Club Porteño afirmó que la oposición lleva a la gente «en manada» a votar.
Ese razonamiento, de fuerte tinte peyorativo hacía las personas con menos ingresos, supone que solo piensan su voto aquellos que votan a Cambiemos.
Una vez más quienes tienen la alta responsabilidad de ocupar cargos únicos, como el intendente, utilizan palabras o frases ofensivas hacia las diversas culturas que componen nuestra sociedad.
Precisamente por considerarse ofensiva, la denominación de «Día de la Raza» o «Día de la conquista de América», fue reemplazada en 2005 por Decreto Nacional Nº 1086/2005. Allí se propuso transformar el 12 de octubre en un «Día de reflexión histórica y diálogo intercultural».
Desde 2010, y por medio de otro decreto presidencial se puso en vigencia la actual denominación:
«Que, asimismo, se modifica la denominación del feriado del día 12 de octubre, dotando a dicha fecha, de un significado acorde al valor que asigna nuestra Constitución Nacional y diversos tratados y declaraciones de derechos humanos a la diversidad étnica y cultural de todos los pueblos» (DEC. 1548/10)
Este tipo de discurso no puede dejarse al azar, tomarlo como secundario o naturalizarlo. Las palabras que utilizamos son las concepciones que tenemos del mundo. Los dirigentes sociales y políticos son los principales en un estado democrático de promover la igualdad de derechos ante la diversidad cultural.