(Gacetilla de Prensa)
Como dije a principio de Abril de este año en mi blog personal, transcribo un fragmento de la nota titulada: “Tarifas y subsidios, un debate caliente”:
 
Primero fue la devaluación de diciembre, que aceleró la inflación del primer trimestre de 2016 y erosionó la capacidad adquisitiva de los salarios … Luego llegaron las boletas de la luz y gas, el cual ambas sufrieron  suba descomunales, todo esto, combinado con la reducción de los subsidios, lo cual multiplicó algunas facturas hasta por 6 veces.
 
Analizando la última factura de gas que llegó a mi casa (en el cual tenemos 1 solo calefactor, 1 termo tanque y 1 cocina), encuentro inconsistencias entre lo que se comunica y lo que realmente ocurre … Por ejemplo: Si tengo en cuenta las cantidades de m3 consumidos (en Mayo de 2015 y 2016) disminuyó un 5% … Ahora bien, si analizó los precios del m3 (en el mismo periodo) se incrementó un 300% de una año al otro.
 
Esta es la cuestión por la cual los Gobernantes Nacionales, Provinciales y Municipales deben evaluar y replantearse de la política Energética y no hacer pagar al pueblo las malas medidas, por ejemplo: Comprarle Gas a Chile le sale a la Argentina 3 veces más caro que comprárselo a Bolivia, ya que el Gas que viene de Chile en realidad viene desde Asia, ya que carece de este recurso).
 
Y nosotros como sociedad, debemos unirnos y reclamar en pos de que se cumplan nuestros derechos como consumidores y ciudadanos, y no basar nuestra lucha en contra de un Gobierno.
 
Indudablemente se vienen tiempos de vacas flacas y debemos ajustarnos a los tiempos que se viven, esperando con esperanza que el mañana sea mejor, por el bien de todos.