Ana Gabriela Ríos de 26 años, oriunda de Jujuy, estudiante de veterinaria en la Universidad Nacional de Tucumán, el viernes pasado cayó desde un cuarto piso cuando se encontraba en el departamento de su novio, ubicado en la provincia de Tucumán, agonizó tres días en el Hospital Paella y murió el domingo.

Su pareja, Facundo Guerrero, declaró que su novia decidió suicidarse porque estaba deprimida, pero los familiares de la joven aseguran que se trató de un femicidio.

Todo comenzó en las primeras horas de la madrugada del viernes cuando Ana fue a visitar a Facundo a su edificio. De acuerdo al testimonio del acusado, ella estaba en estado de ebriedad y deprimida porque la habían despedido de su trabajo. Sin embargo, después se corroboró que no había sido así.

La pareja mantenía una relación de más de seis años, el estaba en libertad pero con prohibición de salir de la provincia. Ahora en las últimas horas fue detenido en el marco de un posible femicidio.

La familia de Ana está convencida de que se trató de un episodio de violencia de género y descartaron que ella haya querido suicidarse. «Está claro que hubo una relación de violencia de más de dos años. Pudo haber sido Facundo porque llegó al departamento después de haber estado con sus amigos y cada vez que tomaba se ponía violento», relató Marcos Ríos, el hermano de la estudiante.

Las amigas de Ana también hablaron de una relación conflictiva e incluso comentaron que el año pasado la estudiante le había hecho una denuncia por violencia de género a su novio en la Comisaría 1 de San Miguel de Tucumán.