Pocos minutos antes de las 20 horas, Cristina Fernández de Kirchner comenzó su tan esperado discurso en un día de la militancia muy especial, en el marco del aniversario 50º del regreso de Perón a la argentina luego de su largo exilio. La vicepresidenta, visiblemente emocionada después que se escuchara el himno nacional, comenzó diciendo: «No se imaginan las ganas que tenía de volver a verlos». Haciendo un balance histórico del peronismo y su larga proscripción política, CFK señaló: «Que nadie venga a explicarnos a los peronistas lo que es la libertad de poder opinar, hablar, expresarnos».
Vida y Democracia
En un primer tramo de su alocución la vicepresidenta se refirió, parafraseando el célebre lema alfonsinista, a que el anhelo de que con la democracia se iba a poder comer, curar y educar no se cumplió, pero que, no puede menospreciarse, que «con la democracia se puede vivir». Revalorizó la democracia, que entiende la vicepresidenta «hoy algunos ponen en duda» y que, al hacerlo, están dudando «nada menos que del valor de la vida».
Estas primeras palabras enmarcaron la posterior referencia que realizó a su intento de asesinato: «El 1ro de septiembre se quebró por primera vez el acuerdo democrático de respetar la vida» e invitó a volver a ese pacto cívico y político básico: «Creo que es obligacion de todas las fuerzas politicas de Argentina volver a reconstruir ese acuerdo democrático separando a los violentos».
Sobre la seguridad de los «mano dura»
La vicepresidenta no rehuyó a expresar la cuestión de la inseguridad. Recordó el asesinato, hace un año, de Lucas González a manos de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, aunque aclaró: «pudo haber sido también en la provincia de Buenos Aires». También recordó el caso de de Monte, donde policías estuvieron involucrados en una persecución contra jóvenes que terminó en una masacre. Tildó de «berreta» el debate sobre la seguridad en términos de «mano dura» o «garantismo»: «Hay que terminar con debates absurdos, porque la democracia tiene una deuda en materia de seguridad. Ningún partido político lo ha podido solucionar», sostuvo Cristina.
La permanente resurrección del peronismo
Sobre los distintos intentos, pasados y presentes, de erradicar al peronismo de la escena política argentina, Cristina Fernández arremetió: «El peronismo siempre termina reencarnandonsé. Lo que parecía muerto y sepultado, no lo es. ¿Por qué no prueban una vez sentarse a conversar con el peronismo a ver qué modelo de país quieren? El peronismo es no estar condenado por la cuna».
Sobre el rol del Kirchnerismo dentro del peronismo de las últimas décadas, Cristina Fernández ofreció un balance que, a su vez, habló de las posibilidades futuras del movimiento: «Acá lo único nuevo que hay somos nosotros. Los que cambiamos la Argentina después de 2001 somos nosotros«, expresó en un tramo de su mensaje, en el que recordó que durante los gobiernos kirchneristas los trabajadores alcanzaron «el 50% de participación en el PBI» y el país tenía «los salarios más altos en dólares de Latinoamérica».
Precios, salarios y tarifas
Cristina Fernández volvió en su discurso a uno de los tópicos sobre los que lleva tiempo insistiendo: la alineación de precios, tarifas y salarios: «El gran punto de quiebre fue volver a un brutal endeudamiento del país. Tenemos que generar recursos no para generar valor, sino para pagar la deuda. Es necesario alinear precios, salarios y tarifas«.
Advirtió, que después del mega endeudamiento macrista, se «va a requerir que la mayor parte de los argentinos tiremos todos juntos para el mismo lado. Si no es así, nuestro país será difícil para cualquiera«. Y remarcó que los problemas no se reducen solamente a ganar las elecciones, sino que «los condicionamientos son tan graves, tan profundos» en relación a la pesada herencia que dejó el gobierno de Mauricio Macri.
El poder judicial
La vicepresidenta Cristina Fernández indicó que «donde no hay jueces puestos a dedo, presionables y eternos en sus cargos el sistema funciona», y señaló que «no es bueno para el pueblo» que sean los magistrados los que «deciden sobre las políticas económicas del país».
«Hoy esta inflación que tenemos de 6,3 en el país, en el desagregado se ve que que las telecomunicaciones son de 12 puntos, el doble, y es porque hay jueces que dijeron que el decreto que se firmó para que sea servicio público no se debe aplicar«, reseñó la vicepresidenta.
Moreau, Valdés, Gioja y Carlotto por la candidatura de CFK
Más temprano el diputado Eduardo Valdés había manifestado que el indiscutible liderazgo de CFK al interior del campo nacional y popular hace que: «nosotros la veamos Presidenta, sin lugar a dudas». El legislador, muy cercano a Alberto Fernández, agregó que «Cristina es unidad, ella nos une».
Por su parte, el ex-gobernador sanjuanino, José Luis Gioja, destacó: «Como dicen los pibes, se me van a cargar todas las pilas para trabajar, soñar y militar. Eso nos va a llevar a que el ‘luche y vuelve’ esté vigente y podamos facilitarle a Cristina, y ella pueda decir que sí«.
A su vez, el dirigente radical alineado con el Frente de Todos, Leopoldo Moreau, al arribar a La Plata y referirse a las razones que lo llevaron al acto, señaló: «significa venir a acompañar a decenas de miles de argentinas y argentinos que llegan con la esperanza de que Cristina sea candidata en 2023». Sobre esto punto, Moreau se explayó: «Tengo la certeza de que Cristina debe ser candidata porque a la Argentina se le presenta una gran oportunidad en el mundo por sus recursos naturales. Ahora, esa oportunidad puede transformarse en un nuevo fracaso depende de quien administre», opinó.
Más matizado fue el apoyo del Ministro de Defensa, Jorge Taiana, que consultado sobre si apoyaría una eventual candidatura presidencial de CFK para el año próximo respondió: «Personalmente sí, pero creo al mismo tiempo que no es momento de definir candidaturas porque el tiempo ahora es de unidad, de tener un rumbo claro para fortalecernos para poder triunfar el año que viene».
Cristina Fernández se refirió a esta posibilidad en los siguientes términos durante su intervención en La Plata: “Todo en su medida y armoniosamente, como decía el General”.
No obstante, el entusiasmo popular por la candidatura de CFK es muy importante. Al retirarse del Estadio Diego Maradoina, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, declaró: «Me voy muy contenta. Creo que tenemos una futura presidenta»