Parece que la situación en la educación pública va para peor, a contramano de las promesas gubernamentales. No sólo que el gobierno no puede asegurar el comienzo de las clases en provincia de Buenos Aires, por la falta de una propuesta acorde para los docentes, sino que ahora una nueva medida pone en jaque a algunas comunidades.
Tanto Chacabuco como las ciudades aledañas están viviendo cierres de cursos y escuelas que desatienden a aquellos que más necesitan. En nuestro caso, ha sido afectada la escuela primaria Nº 13 de Castilla, donde los padres de 53 alumnos recibieron con sorpresa la decisión de las autoridades de cerrar la mayoría de los cursos.
Los vecinos que habían enviado una carta al Inspector en Jefe, Ruben Cruz, manifestando su desacuerdo por la decisión ayer habían planificado una jornada de protesta en la plaza de la localidad.
Sin embargo, la convocatoria pudo ser llevada a cabo a medias porque en cercanías al mismo horario los padres fueron citados a una reunión por el inspector Cruz.
Según respondió una de las madres a La Posta la coincidencia fue interpretada como «una estrategia de su parte para callarnos».
Los padres indicaron a La Posta que Cruz «entró directo a la escuela, se reunió primero con los docentes, directora, delegado municipal de Castilla, Sr. Santiago Terrile y con el Sr. Mariano Cámera«.
Al mismo horario que estaba convocada la protesta, se les permitió el ingreso a los padres y a los gremios docentes, así como al Concejal Martín Carnaghi quien estaba presente en apoyo a los padres.
Durante la reunión Cruz explicó que la postura gubernamental es la de «optimizar recursos», contó a La Posta una de las madres. Esa fue la principal explicación que brindó el inspector en la reunión, por lo que Carnaghi expresó en su cuenta social de Facebook «Optimización es ajuste».
Los padres, por su parte mostraron la disconformidad en una jornada angustiante. Una de las banderas que exhibieron señalaba «¿Cuál es tu problema con Castilla, Cruz?».
