La ex mandataria, Cristina Fernández de Kirchner, salió a desmentir en su página oficial y a través de las redes sociales, los rumores acerca de su vinculación con ciertos miembros del Poder Judicial durante su gestión.

Y en ese sentido, consignó que las únicas reuniones que mantuvo en la Jefatura de Gabinete de Olivos, con magistrados, no fueron secretas, algo que, a su entender, es «casi imposible en Argentina».

Al respecto, aseguró que mantuvo encuentros «con miembros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, y con los doctores (Domingo) Sesin y (Eugenio) Sarrabayrouse».

El texto arranca diciendo:

Nunca hubo reuniones secretas durante mi gestión con miembros del Poder Judicial, ni en la residencia de Olivos, ni en ninguna otra parte. En efecto, por obvias razones de carácter institucional, he mantenido reuniones con el Dr. (Ricadro) Lorenzetti, con la Dra. (Elena) Highton de Nolasco y los Dres. (Eugenio) Zaffaroni y (Enrique) Petracchi. La llevada a cabo con los otros dos magistrados fue con motivo del envío, oportunamente, de sus pliegos al Senado de la Nación, para completar la integración de la Corte.

La líder del Frente para la Victoria agregó:

No acostumbro a estar desmintiendo cada una de las barbaridades que cotidianamente se publican, o dicen distintos personajes ante un micrófono o una cámara de televisión. Fue y es una conducta que observé durante mis dos mandatos.

De esta forma, Cristina salió al cruce de publicaciones periodísticas que sugirieron en los últimos días que durante su mandato había mantenido encuentros con el juez federal Sebastián Casanello, a cargo de la causa por lavado de dinero en la que se investiga al empresario Lázaro Báez, actualmente detenido.

En igual sentido, manifestó:

«Que alguien o algunos letrados, como estrategia de defensa judicial, pretendan vincularme con un juez de Comodoro Py, es absolutamente inaceptable. Sobre todo cuando el juez es, nada menos que el Dr (Sebastián) Casanello. Sí, el mismo que absolvió a Mauricio Macri en la causa de las escuchas ilegales, al día siguiente que asumiera como Presidente, sin que a nadie se le moviera un pelo».

Finalmente, Cristina estimó que si el Panamá Papers hubiera ocurrido durante su gestión, «lo que se vio en Brasil con la compañera Dilma Rousseff, hubiera sido apenas una película para niños».