Corina De Bonis salió del CEC N°801 a las 17 hs. cuando fue interceptada en un auto con tres sujetos. Uno le pegó una “piña” en la panza y la metieron en la parte de atrás. Acto seguido le pusieron una bolsa en la cabeza y con un punzón le escribieron en el abdomen: “Ollas no”.

La docente ya había recibido amenazas previamente al hecho, le habían hecho volantes con frases al estilo “no hagan política, den clases”, y también “la próxima olla la van a hacer en Güemes y Roldán” (dirección del cementerio de Moreno).

En medio de una profunda tristeza y bronca, repudiamos, rechazamos profundamente, practicas dolorosas, que nos remontan a los años más oscuros de nuestra historia. Practicas que encuentran un correlato en el discurso demonizador y persecutorio de un Gobierno que sistemáticamente atenta contra los derechos de todos y todas. Gobierno que encuentra entre sus funcionarios los mismos apellidos que usufructuaron el poder durante la última dictadura cívico militar. Gobierno que encuentra entre sus funcionarios el sostén ideológico que habilita y legitima este horror que hoy nos conmueve.

Vivimos una etapa política donde la formalidad democrática no se traduce en una forma de vida donde todos y todas tengamos garantizados el Estado de Derecho.

En este marco, manifestamos con absoluta claridad, no hay mecanismo represivo que ponga barreras a las organizaciones sindicales y demás expresiones de nuestro pueblo a seguir llevando nuestros reclamos adelante. Mientras Macri fomenta el odio y el revanchismo de clase, caldo de cultivo para que sucedan esta aberraciones, nosotros además de repudiar, fortalecemos nuestras organizaciones, unidad y lucha, porque estamos convencidos que otro país es posible.

CTA de Los Trabajadores

Chacabuco