La participación argentina en el Foro Económico Mundial realizado en Davos estuvo alentada por la estrategia electoral que Cambiemos ha tejido para este 2019. Todos coinciden en que relanzar el consumo, como hizo Macri en 2016-2017, no será una posibilidad que tenga en sus manos este año.

Debido a ello, la principal apuesta es transmitir tranquilidad a los grandes conglomerados de poder, ya sean banqueros, inversores, empresarios, tenedores de bonos o todas esas cosas juntas.

Allí el Ministro de Economía, Nicolás Dujovne participó junto a Guido Sandleris, presidente del Banco Central, de una conferencia de prensa que no logró captar, como en años anteriores, la atención de la prensa mundial.

«Estamos viendo la estabilización de la economía. La inflación se está desacelerando y todas las variables estables. Recuperamos el camino para volver a crecer. Creemos que el país crecerá en 2020», dijo Dujovne pintando un panorama desalentador para los argentinos y las pymes.

Para el año 2019, sostuvo, Argentina seguirá profundizando su esquema recesivo con una reducción en el nivel de actividad del 2%. El Fondo Monetario Internacional ha estimado una caída mayor, cercana al 2,8%. Y las calificadoras de riesgo permanecen expectantes ante cómo se desenvuelve el inestable sistema financiero argentino.

«La inflación fue muy alta el año pasado. Bajarla es el desafío más grande que enfrentamos. Pero reducirla a un dígito no se resuelve en un año sino que toma tiempo. Estamos trabajando para lograrlo», indicó Sandleris.

Hoy, el Ministro y el Presidente del BCRA serán recibidos por la Directora del FMI, Christine Lagarde, para evaluar el programa de financiamiento que el gobierno solicitó a la organización. Según se conoció, entre las condiciones el FMI exigirá que el gobierno baje los haberes a los nuevos jubilados que se incorporen al sistema previsional.

Por último, Sandleris defendió el programa de endeudamiento del gobierno: «El Fondo es parte de la solución«.