Enero acumuló 6.639 nuevos despidos y suspensiones. La cantidad de personas que se quedaron sin empleo en el mes prácticamente fue el doble al numero de diciembre y si lo comparamos con enero de 2017, el resultado es también un incremento del doble.
Esta nueva ola de cesantías fue motorizada por la decisión del Gobierno de no renovar miles de contratos de trabajo en la administración pública nacional.
El 58% de los despidos del mes de enero fueron provocados por expulsión de trabajadores del sector público. Por otro lado, en el sector privado, hubo 2761 despidos en empresas, donde el 82% de este numero correspondió al sector industrial.
Este ajuste había sido preanunciado en los últimos meses del año por el Ministerio de Modernización, que preparó el terreno para los despidos estableciendo un plan de «dotaciones óptimas» de ministerios y organismos del Estado.
Luego, Mauricio Macri dio la señal de largada con una serie de llamados a la «austeridad». Donde en un acto público señalo que “Debemos vivir con los recursos que tenemos”.
