En otro tramo de la entrevista concedida a La Tecla, el ex presidente de la Cámara de Diputados, Julián Domínguez, se refirió a la actualidad del país y al proceder judicial

-¿Cómo ve al Gobierno de Macri?
Si uno mira que el primer trimestre del año arrojó un millón cuatrocientos mil nuevos pobres; que en el primer semestre se emitió deuda por 20 mil millones de dólares; que cayeron el consumo, la producción de autos y la producción industrial; que disminuyó la exportación; que tenemos una balanza comercial negativa; que aumentó la importación de bienes de consumo; que disminuyó la importación de bienes industriales; el pronóstico no es bueno en la dirección que inicialmente tomó el Gobierno.

-El Gobierno se defiende con la herencia…
-El Gobierno ha perdido la oportunidad de crear una mesa de concertación social que pudiera resolver los temas que eran de preocupación de los argentinos. Y la gente recuerda que hasta el 10 de diciembre tenía posibilidad de consumo, vivía bien. En las vacaciones del año pasado, en la segunda vuelta de las elecciones de CABA, cuando habló quien hoy es Presidente, remarcó lo que el Gobierno había hecho bien. Es decir: me parece que se construye un escenario diferente del que la gente tiene registrado. Creo que es inmaduro para la democracia hacer responsable a otros de decisiones que uno toma.

-¿Coincide con Cristina Fernández en que el Poder Judicial la persigue?
-Los hechos de corrupción, de nuestro partido y el resto, deben ser castigados con la máxima severidad, pero con juicio justo. Llevarla a Cristina a declarar por la causa del dólar futuro, por una decisión de política de Estado y una devaluación que no hizo la Presidenta sino la actual administración, me parece que tiene un sesgo absolutamente desproporcionado.

-El oficialismo sostiene que el kirchnerismo fue un sistema de corrupción.
-Lo que pretenden es anestesiar la opinión crítica poniendo en discusión la corrupción. No puede haber liderazgo político que esté cuestionado en su decencia. Los liderazgos son ideas, pero, también valores personales. No se puede conducir un pueblo a un destino feliz si es cuestionada su capacidad y su decencia.

-Cristina, por ejemplo.
-De la Presidenta, todavía, en forma directa no se ha demostrado nada. Si algo hizo mal, tendrá que rendir cuentas a la Justicia, como lo está haciendo. La oposición, los periodistas más calificados de la oposición y Bonadío han dicho que, por lo que se tiene (pruebas), “la Presidenta no va a ir presa”. Coincido con ella en que hay una desproporcionada actividad judicial.

FUENTE: LA TECLA