En un entrevista exclusiva que dio el dirigente bonaerense para el portal La Tecla, habló de la situación política del peronismo y en particular en la provincia de Buenos Aires. A continuación la nota completa:

“El Termómetro es un espacio de investigación, de análisis de la realidad y de pronósticos”, señala el ex presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Julián Domínguez, al referirse al documento de análisis político y social de la Argentina que está difundiendo.

En diálogo con La Tecla, el chacabuquense amplía sus conceptos y comparte su visión sobre la coyuntura política actual, la administración de Cambiemos, el vínculo del Presidente con el Papa, la situación judicial de Cristina Fernández y el rol del peronismo como partido opositor.

-¿Qué análisis hace de la actualidad del peronismo?
-El peronismo está más vivo que nunca; en sus valores, en su visión del presente y de su futuro. El problema lo tiene la dirigencia en reordenarse, pero hay un campo fértil en nuestra Argentina para defender una sociedad con inclusión, con los trabajadores adentro, que defienda el trabajo, la pequeña y la mediana empresa, la producción, la industria, el crédito orientado a la inversión. Hay una visión clara que el Gobierno le está dando la espalda a lo social. El desafío de la dirigencia es tener una visión de defender un proyecto de país que crea en las capacidades nacionales. Y el peronismo tendrá que tener la generosidad de encuadrar a los hombres más representativos para hacerla competitiva en las elecciones del 2017.

-Siempre se habla de unidad pero cada vez son más los sectores. ¿Cómo se hace para llegar unidos?
-El diálogo debe ser la característica de este tiempo. Tener capacidad de diálogo no significa renunciar a la visión y a la convicción que se tiene. Cuando ha habido una derrota en el peronismo, los procesos de reconstrucción de los liderazgos políticos no han sido sencillos. La tensión es cómo construimos el futuro, pero si hay algo que todos tenemos en común es que el modelo de Gobierno y las políticas de Macri están llevando a la Argentina a la expulsión, a la exclusión, a la pérdida del poder adquisitivo de los trabajadores y a la pérdida del proceso de industrialización nacional. Es mucho más fuerte lo que está pasando en el país y la necesidad de reordenarse que las mezquindades personales. Y como en el 2017 no se discute otra cosa que la representación legislativa, me parece que el peronismo está en condiciones de ordenar esto.

-Tendría que ser más fácil. Si fuera el 2019 el que viene, sería más difícil.
-Yo creo que el peronismo va a ordenar esto. Será en un proceso interno. Lo que se va a discutir son valores, lo que se va discutir es una visión de país; y en esto creo que hay amplias coincidencias.

-¿En cuál de todas las vertientes está Julián Domínguez?
-Yo soy yo y mi distrito. Con los compañeros de nuestra generación que creemos que es necesario construir un frente político que defienda los intereses de la Argentina. Por lo tanto tengo punto de encuentro con todos los dirigentes nombrados. Dialogo, participo y aportamos nuestra visión. Hoy estamos trabajando en lo que es la presentación del Termómetro, que permite analizar la realidad social; no podemos construir pronóstico de futuro sin mirar lo que está pasando en la sociedad. Yo me imagino en ese rol: ayudando a construir puentes, ayudando a construir puntos de encuentro y que logremos una lista que represente principios, valores y nuestra identidad desde el peronismo.

-¿Massa es parte de ese todo? ¿Lo ve como parte de ese todo?
-No; para mí, no. Particularmente yo creo que Massa es un límite. Massa ha acompañado en medidas estructurales al Gobierno. Sergio eligió acompañar
a Macri en temas estructurales en el diseño del país, que lo aleja de la centralidad política del pensamiento del peronismo.

-Ahí sí ya hay una diferencia importante con otros peronistas, que sí quieren a Massa adentro.
-Esta es la visión de la democracia. Yo creo que el peronismo no debe buscar afuera lo que sobra adentro. Nosotros tenemos dirigentes, intendentes, legisladores, compañeros de movimientos obreros muy importantes.

-¿Y Randazzo?
-Randazzo es parte de esta visión. Randazzo es un dirigente que se ha ganado un lugar de mucho prestigio en este espacio político, en esta corriente de opiniones, de sentimientos de la gente. Su gestión ha sido muy valorada. Es uno de los dirigentes que más posibilidades tienen de acompañar este proceso.

-Pero le sacó el cuerpo el año pasado.
-Eso habría que preguntárselo a él. Yo no puedo responder por él. Me parece que si él tiene la visión personal de aportar, tiene mucho para aportar.

-¿Cristina está dentro de este espacio que quiere la unidad y quiere llegar a gobernar en 2019?
-Hace mucho que no charlo con la ex Presidenta. Lo que creo es que Cristina está en el corazón de nuestro pueblo. Porque nuestro pueblo se acuerda que hasta el 10 de diciembre con ella vivió mejor. Lo que tácticamente irá a hacer ella, no lo sé, pero es parte de la mejor herencia que nosotros rescatamos de nuestros doce años de gobierno.

-Está hablando en pasado.
-Es presente en el corazón de la gente. Cristina ocupa un lugar muy importante en los sectores nacionales.