PUBLICACIÓN PEDIDA – Desde el perÍodo 2003-2013 la cantidad de personas por debajo de la pobreza disminuyó en un 67 por ciento y las soluciones habitacionales finalizadas y en ejecución alcanzaron 1.037.080, entre las que se incluyen el mejoramiento de viviendas y la construcción de nuevas casas.
Sin embargo, a pesar de todo el trabajo realizado para mejorar la calidad de vida del pueblo argentino, son 4.419.000 las personas con inconvenientes para integrarse socialmente.
En los primeros 95 días del gobierno de Macri hemos visto un proceso extraordinario de aceleración inflacionaria, en conjunto con medidas en materia de política económica que trajeron más dificultades para los trabajadores, los más humildes y la clase media: la devaluación del peso argentino, que llegó hasta el 67 por ciento (con un dólar que pasó de 9,58 pesos el 10/12/2015 a 16,03 el 02/03/2016), la eliminación de derechos de exportación (retenciones), liberación de cupos de exportación a productos de la canasta básica (carne), desarticulación del programa de Precios Cuidados y el incremento de tarifas de servicios públicos (energía eléctrica, gas y transporte).
La tasa de inflación, que hasta octubre era de 1,8 por ciento, pasó a 3,7 por ciento desde enero del 2016, con una caída del poder adquisitivo de más del 25 por ciento, sumando a que la mayoría de los sectores que integran nuestra sociedad no se han visto beneficiados con las modificaciones anunciada del impuesto a las ganancias.
Resulta importante destacar que, los trabajadores, para no perder poder adquisitivo, requerirán un 40 por ciento de aumentos de sus salarios, muy superior al 25 sugerido por el gabinete del presidente Macri.
Por otra parte, ya son más de 59.000 los despidos de sector privado junto a los 32.500 contabilizados del sector público.
Sumando a la urgencia del presidente de acordar con la usura internacional, es necesario destacar cómo sistemáticamente el espacio Cambiemos le ha mentido a la sociedad hablando de «pobreza cero» como slogan de campaña.
El máximo referente del espacio Cambiemos a nivel local, Marcelo Daletto, el intendente Victor Aiola, su gabinete, junto a sus representantes en el Concejo Deliberante, deberían rendirle cuenta a la comunidad por haberle pedido por una opción electoral que a Chacabuco sólo le traera empobrecimiento de la clase media, viéndose perjudicados por las decisiones de gobierno los trabajadores municipales, los trabajadores en relación de dependencia, las cooperativas y pequeñas y medianas empresas, los comercios, y sobre todo, los más humildes.
Profesor Andrés Colicchio