Todavía hay muchos usuarios residenciales que no están recibiendo las facturas de gas del invierno, pero la demora está dentro de lo que se venía anticipando.

En tanto, los nuevos aumentos dispuestos por el Gobierno rigen desde el 7 de este mes y se pagarán a partir de enero.

Las distribuidoras no emitieron boletas desde el 11 de julio hasta principio de octubre, y ahora deben recuperarse lo que fueron casi tres meses sin facturar, estimándose que recién a fin de año quedarían todas las cuentas regularizadas.

Desde principios de Octubre, los hogares están recibiendo facturas con los consumos bimestrales de abril y mayo refacturados con las tarifas vigentes al 31 de marzo. Aún cuando la boleta recibida anteriormente contenga sólo parte de abril con las subas, se recibe la refacturación.

Se espera que las boletas con los bimestres siguientes se reciban en forma mensual y con dos talones para el pago, aun cuando el usuario tiene derecho a gestionar hasta cuatro cuotas mensuales en la oficina comercial de la distribuidora, según las disposiciones del Enargas.

En Capital Federal y Gran Buenos Aires -con excepción de La Matanza, donde había un fallo anterior suspendiendo los aumentos de abril- , el 11 de julio las empresas dejaron de emitir facturas por la decisión de la Cámara Federal de La Plata que anuló las resoluciones que establecieron las subas.

El 18 de agosto, la Corte Suprema dictó el fallo por el que obligó a refacturar con los valores vigentes al 31 de marzo a los residenciales de todo el país , y una semana después el Enargas publicó las resoluciones con los mecanismos que deben aplicar las empresas debido a la decisión judicial.

Pero después cada distribuidora tardó en adaptar los sistemas informáticos y recién en la segunda quincena de setiembre se emitieron las primeras boletas que son las que están en circulación ahora.

La situación es distinta en las jurisdicciones donde por fallos previos al de la Corte, las distribuidoras habían comenzado antes a adaptar los sistemas a los valores anteriores a los aumentos de abril, como en Chubut o Bariloche.

Se calcula que el consumo de gas aumentó un 40% en los meses de abril y mayo, se estima que gran parte de los hogares recibirán las boletas con los cuadros tarifarios vigentes al 31 de marzo sin ahorro, es decir tarifa plena.

En cambio, como en junio y julio se produjo una reducción del 20% en el consumo, puede haber casos en que se apliquen las tarifas de 2015 con las bonificaciones por ahorro.

Los que pagaron las facturas recibidas hasta mediados de julio, tienen un saldo a favor que se acredita en las nuevas boletas hasta que se agote el crédito.

FUENTE: Ámbito.com