La declaración de Emergencia Económica de la Municipalidad de Chacabuco sigue en el centro del debate por la sorpresa con que el intendente tomó la decisión.

Tampoco tiene una lógica explicación cómo el Municipio, que contó con un presupuesto que superó los 1600 millones, terminó en esta situación.

Ante esto, el actual diputado y exintendente Mauricio Barrientos realizó fuertes críticas mediante una publicación pedida. Allí recordó que cuando abandonó el cargo de intendente y fue sucedido por Aiola, éste solicitó una auditoría porque sospechaba de lo que se había realizado con el dinero.

Así fue: a poco de asumir Aiola impulsó diversas acciones judiciales o institucionales destinadas a desacreditar a quienes lo precedieron. Lo hizo contra Mauricio Barrientos, contra Darío Golía y contra Julián Domínguez. No hubo ningún resultado que diera la razón al intendente Aiola.

La euforia del triunfo de Aiola

Entre las medidas, Aiola solicitó que se audite la gestión de Barrientos, realizando fuertes críticas por el ingreso de personal y el pago de horas extras. Esa auditoría se realizó y nunca se conocieron los resultados.

Ahora es Mauricio Barrientos quien pide que se realice una auditoría externa con el objetivo de determinar qué sucedió con el dinero, ya que en su punto de vista los ingresos municipales de este año fueron millonarios y que Aiola durante su gestión tomó 350 nuevos empleados municipales.

Declaración de la Municipalidad en Emergencia Económica

(Publicación pedida)

DECLARACIÓN DE EMERGENCIA ¡CON INGRESOS MILLONARIOS!

El intendente Aiola inició su gestión en el 2016 beneficiándose enormemente con el aumento de los recursos provinciales. Así, la Provincia pagó a los Municipios una deuda de aproximadamente 3.500 millones, se aumentó la coparticipación producto de la incorporación de camas hospitalarias (ampliación Geriátrico Hospital del Carmen e Inaguración Geriátrico Santa Ana de O’Higgins). A octubre de este año recibió en concepto de coparticipación más Descentralización Tributaria la suma de $850 míllones. A todo ello, hay que sumarle los ingresos extraordinarios proveninientes del Fondo de Obras Públicas Provincial (F.O.P), aproximadamente unos $150 millones.

Sin embargo, a 4 años de su propia gestión, termina declarando, a partir del 1 de diciembre de 2019 y antes de finalizar su mandato, la Emergencia Económica del Municipio. En el Decreto 1460 del 14/11/2019 se fundamenta que la inflación a octubre es del 42,2% provocó el aumento de los costos y la caída de la recaudación municipal.

Difícil de entender cuando en la campaña se hablaba de «Ciudad Modelo». Máxime cuando los que gobernaron el país, la provincia y el municipio pertenecen a la misma Alianza Electoral: CAMBIEMOS. De una rápida comparación del Presupuesto 2015 con el Presupuesto 2019 surge que se «incrementó» la Planta del Personal en más de 200 personas, a pesar que en 4 años se jubilaron alrededor de 150 trabajadores. Vale decir, se realizaron «350 nombramientos».

Además surge que se incrementó el «Gabinete de Funcionarios» y se aumentaron sustancialmente sus sueldos. Esto solo representa más de 100 millones de pesos.

También de la comparación surge un aumento considerable de la deuda municipal, y ahí está la razón del gran atraso en el pago a proveedores.El 18 de Diciembre del 2015, el intendente Aiola, anunció el inicio de Auditoría Contable, a cargo de técnicos profesionales pertenecientes  Auditoría General de la Nación (AGN), con la finalidad de determinar el estado económico-financiero de la Municipalidad.

Justificaba la Auditoría afirmando: “No muestran porque ocultan algo; una Auditoria para saber cómo se ha administrado el Municipio será mí primer medida de gobierno”,  «La Auditoría es de corte y que a partir de ella puede resultar la necesidad de realizar Auditorías específicas sobre algún punto en particular”.

Pasaron 4 años de ese anuncio con bombos y platillos y nunca publicó los resultados de la Auditoría. El objetivo politico de la Auditoría era replicar a nivel local el relato duranbarbista: «Se Robaron Todo». Claramente nunca mostraron la Auditoría porque dejamos una gestión honesta y ordenada, que había desminuido la deuda municipal, y no se incrementó el Personal Municipal.

Por eso, para mayor transparencia y objetividad, es imprescindible requerir una nueva Auditoria Contable de la Auditoría General de la Nación (AGN). De la comparación con la realizada en el 2015 surgirá claramente cuáles son las reales causas de la emergencia que ponen en riesgo el pago de salarios y proveedores, y en consecuencia, el normal funcionamiento del Gobierno Local.

Una nueva Auditoria realizada por un órgano externo al Municipio que determine la utilización de los recursos públicos, cantidad de ingresos, sueldos de los Funcionarios Políticos, uso de Fondos Afectados y/o de Cuentas de Terceros, y demás datos e información, transparentará la verdadera situación económica del Municipio.

Este es un punto de partida ineludible. De lo contrario, en el futuro se pretenderá hacer responsable de la crisis municipal a los exintendentes peronistas, al Gobernador Axel Kicillof y al Presidente Alberto Fernández.

Dr. Mauricio Barrientos, exintendente municipal, 2011-2015