El padre del presidente de la Nación Mauricio Macri, el empresario Franco Macri, ha sido beneficiado con la suspensión de su indagatoria luego que un grupo de peritos, a pedido del juez Claudio Bonadío, estableciera que no se encuentra en condiciones físicas ni psicológicas de hacerlo.

Franco Macri y su hijo Gianfranco, hermano de Mauricio, fueron citados a declarar acusados de haber pagado sobornos para beneficiarse en la contratación de obra pública.

La investigación se produce en el marco de la causa que analiza las fotocopias de los cuadernos del chofer Omar Centeno donde se consignarían los pagos de retornos por contratación de obra pública durante la gestiones de Cristina Kirchner y Néstor Kirchner.

El empresario tiene 88 años y aseguran que no se encuentra en condiciones de salud para prestar una declaración testimonial. En tanto que sus abogados insisten en que se desestime la acción pues entienden que no hay motivos para que se los investigue.

Resta resolver la situación procesal del hermano de Mauricio Macri.