En la entrevista que Gabriela Belfortti mantuvo con La Posta dio detalles del avance de la obra que ampliará notablemente la capacidad de alojamiento de la institución, pero además hizo referencia a los innumerables problemas que vive la institución tanto por la crisis económica en nuestro país y nuestra ciudad, como por las nuevas medidas del PAMI que cambiaron los requisitos para entregar pañales.

Consultada por cómo repercute en los abuelos o en la institución el fuerte aumento de los medicamentos, en los que los abuelos ¿invierten? cada vez más una buena parte de sus haberes, Gabriela respondió: «A veces es un poco complicado, sobre todo por la burocracia. Nosotros tratamos de estar cerca de los familiares, de ayudarlos en lo que nosotros podamos, para que los trámites sean más ágiles. Pero realmente para el que vive día a día, para los que trabajamos, que andamos como locos, la burocracia que plantea PAMI es un poco engorrosa. Tratamos de llevarlo como podemos, sabemos que a las familias para conseguir las cosas se les complica».

Y especificó cómo es la situación puntual con los pañales: «El tema pañales por ejemplo, ahora que PAMI no los cubre más o cubre menos o no los entrega o a veces sí y a veces no, también es complicado». Explicó sobre uno de los insumos que la institución, con 39 abuelos, utiliza en gran volumen.

Sobre cómo se manejan en la institución ante la falta de entrega de PAMI, dijo: «No podemos depender de si hay entrega para tener el stock de pañales que necesitan los abuelos. Es un solo ejemplo, pero podría seguir«.

Por último agradeció a todos quienes colaboran e invitó a la comunidad a acompañar a los abuelos: «Que se acerque gente es el mejor regalo que nos pueden hacer. Los esperamos siempre, que se acerquen. Sabemos que los tiempos no son de los más fáciles, pero realmente si les pueden dar una mano, todos nos suma«.