Ayer se conoció que la importante cadena de supermercados La Anónima haría descuentos por el 50% en su sucursal de Chacabuco para hoy miércoles.

Esta política de la empresa destinada a maximizar ventas en días flojos como son los miércoles terminó generando un tremendo caos: personas que llevaban cuanto encontraban, largas colas, aquellos que habían pedido el día para realizar su compra, productos que faltaban, etcétera.

Una docente publicó a través de las redes sociales su opinión sobre el panorama que vio.

Mucha gente se retiró al ver el panorama, otros lo compararon a un «saqueo». Lo cierto es que la economía argentina, con una crisis que el gobierno desconoce, presenta oportunidades para que las grandes empresas realicen suculentos negocios a costa de los escasos salarios de muchos.

La contracara es que quienes pueden tener un salario en blanco y disponer de tarjetas de débito y crédito aprovechan lo que significa una importante rebaja aunque tengan que perder un día  de trabajo o padecer largas horas de cola.

Otra cuestión a tener en cuenta y que algunos resaltaron, es que este dinero es dinero perdido para comerciantes chacabuquenses ya que grandes empresas como La Anónima pueden realizar compras de semejante magnitud que incluso rebajando en un 50% los precios obtienen ganancias, algo que a los pequeños comerciantes locales no les es posible.

Los alimentos, según difunden los principales sondeos de inflación, cada vez se encarecen más y representan un porcentaje cada vez mayor del salario de un trabajador, algo que explica también la gran concurrencia ante la oferta del importante supermercado.