Ayer por la noche en Racing Club el intendente a Víctor Aiola encabezó la celebración por el 25 de mayo con un locro patrio que llamaron «Gran locro radical». El acto estuvo organizado por el Comité Alem y contó con la participación de la juventud radical.

Tuvo como principales oradores al senador Agustín Máspoli, y, por supuesto, al intendente Víctor Aiola. El evento funcionó como trastienda de lo que hoy será la Convención Nacional de la Unión Cívica Radical, donde los máximos dirigentes del partido centenario definirán la continuidad o no dentro de Cambiemos.

Al tomar la palabra, Aiola señaló que hasta que se sube a el escenario no sabe qué es lo que va a decir. Así, su primeras palabras fueron de agradecimiento a los presentes destacando el aumento de los militantes que apoyan su gestión. Recordó, ante un Racing completo, que cuando comenzaron eran «un puñado, se podían contar con los dedos».

Y a partir de allí hizo referencia al espíritu radical recordando a Alfonsín. «Nosotros, como decía Alfonsín, siempre los radicales haciéndonos cargo de todo. Y mañana en la Convención Nacional vamos a demostrar que nos hacemos cargo de todo y en los momentos difíciles más todavía», señaló el intendente dejando clara su posición porque la UCR continúe dentro de Cambiemos.

A partir de allí encaró un discurso de corte electoral: «lo importante no es lo que vamos a difinir ahora en 2019 en una elección. Lo importante que vamos a tener que elegir es el futuro de país que queremos. Si queremos seguir transformando el país o queremos volver a la mentira, al populismo, a la dádiva. Estoy seguro que no queremos eso».

Al borde de cumplir 4 años de mandato, el intendente instó a construir junto a Cambiemos un país mejor: «es el camino más difícil, porque obvio que hay atajos, y han puesto a nuestra disposición muchos atajos, pero nosotros vinimos acá a hacer las cosas como se deben hacer, para poner el país de pie y cumplir con ese sueño que tenemos todos los argentinos de tener un país mucho mejor».

Momentos difíciles

«Sabemos que es difícil, claro que sí, y más difícil es para la gente que le cuesta llegar a fin de mes, pero que sabe que vamos por el camino correcto y este año vamos a poder seguir transformando a nuestra ciudad, nuestra provincia, nuestra provincia y nuestra nación», sostuvo.

Acto seguido hizo alusión a la deserción de militantes, aparentemente a aquellos que quieren acompañar a Aiola pero no a Macri: «Pero algunos que siempre los hay, a veces queriendo y a veces no queriendo, se dejan influenciar a veces por los medios de comunicación por aquellos que son negativos, porque es más fácil criticar, estar del otro lado, más fácil es no hacerse cargo de las cosas».

«Cuando esa gente nos dice ‘y cómo vamos a salir a la calle y qué le vamos a decir a la gente’. Yo les digo, como dijo el expresidente uruguayo José Mujica, que el ser humano es un ser utópico. Que aparte de esa utopía tiene razón, y con la razón no le alcanza, necesita creer en algo, imposible tener fe. Y creer en algo y tener fe es pensar en algo que vamos a poder lograr entre todos los argentinos. Y tener fe no significa que eso llega inmediatamente, significa ir subiendo escalones, peldaño por peldaño. Y nadie dijo que esos escalones iban a ser fáciles, son muy difíciles. Pero nosotros estamos acá porque sabemos adonde vamos, porque esa esperanza, que es esperar con fe un país mucho mejor, que no se logra del día a la noche o de la noche a la mañana, ese esperar con fe es esperar sabiendo que más allá de todo lo que nos cueste hoy, porque sabemos que al vecino y a nosotros no cuesta, pero sabemos que vamos por el camino de dejarle a nuestros hijos y a nuestros nietos un país mucho mejor«.

Libertad según Aiola

A partir de allí Aiola dio paso a un discurso confrontativo, duro y ofensivo hacia los más humildes, a quienes trató de «manadas» que los llevan a votar.

«Estamos convencidos de que estamos haciendo las cosas bien, obvio que por ahí en lo económico está difícil, no nos acompaña lo económico. Pero no vamos a bajar los brazos porque tenemos el convecimiento de que el cambio no es solamente el cambio económico, el cambio económico no alcanza, porque tener no es ser, vivir es ser y sentir. El cambio que tenemos que dar, como dice Mujica, esta en cada uno de nosotros La revolución, la lucha es individual. Es cada uno de los que está acá, que libra esa batalla todos los días. Y la tenemos que seguir librando porque nosotros no queremos el cambio económico solamente, queremos el cambio cultural que es el que nos va a acercar y nos va a dejar un país mucho mejor».

«Vamos por eso, queremos que la gente sea libre, y ser libre ¿es qué?«, se preguntó retóricamente el intendente. «Es poder decidir hacer lo que quiera, votar al partido que quiera, tomar las determinaciones que quiera. Y para que la gente sea libre tiene que poder decidir, tiene que poder ser libre verdaderamente. Nosotros no queremos gente que nos vote como manadas todas las elecciones, queremos gente que piense, que le cueste verdaderamente acompañarnos en momentos difíciles, pero que sepan que la revolución está dentro de ellos, de cada uno de los vecinos de Chacabuco que saben que no podemos volver al pasado, porque si volvemos al pasado es la partida de defunción de todos los argentinos. Tenemos que seguir mirando al futuro, tenemos que apostar al cambio, al cambio que venimos realizando, con esfuerzo, contrabajo, todos los días desde el 2015. Ustedes lo ven en la ciudad, lo ven en la provincia y lo vemos en el país», sostuvo Aiola ante quienes expectantes lo escuchaban.

Gobernar es difícil

En sintonía con el discurso de Mauricio Macri, Aiola afirmó: «No nos vamos a permitir retroceder ni un milímetro hacia atrás, porque estamos convencidos que el camino que estamos siguiendo es el camino adecuado y yo cuento con cada uno de ustedes para dar esa batalla. Desde acá hasta que llegue las nuevas elecciones y haya nuevos candidatos. Y la lucha se da en la calle, en el barrio, con el vecino, en la despensa, con cada uno de aquellos que a veces no se dan una idea de lo que es gobernar un país que nos entregaron en ruinas».

Antes del cierre la ofensa hacia los más humildes fue total: «Lo difícil que es gobernar un país que para que te entregaran un subsidio tenías que afiliarte o ir a un acto político. Lo difícil que es gobernar un país que para tener un crédito tenías que militar en una asociación política. Lo difícil que es gobernar un país donde los planes sociales se le daban a dedo a la gente. Lo difícil que es gobernar un país donde los puestos de empleo también se daban a dedo y no por capacidad».

Luego de las acusaciones hacia el peronismo, que parece mojarle la oreja a Cambiemos y hacerlo saltar como leche hervida, Aiola concluyó: «Luchemos porque la revolución está dentro de cada uno de nosotros«.