La justicia penal de La Plata dictó la prisión preventiva a once de los detenidos por la muerte de los cuatro jóvenes en San Miguel del Monte. Los chicos murieron luego de una persecución y disparos que sufrieron el 20 de mayo. Por otro lado, se ordenó la excarcelación de dos policías: Cristian Righero y Juan Gutiérrez, quienes estaban imputados por encubrimiento y falsedad ideológica.

En su resolución, el fiscal de Cañuelas Luis Damonte solicitó que el capitán Rubén Alberto García, los oficiales Leonardo Daniel Ecilape y Manuel Monreal y el subayudante Mariano Ibáñez continúen detenidos e imputados de «homicidio doblemente agravado por abuso de su función como miembro de fuerzas policiales y por el empleo de armas de fuego«.

A ellos se los acusa de las muertes de Camila López (13), Danilo Sansone (13), Carlos Aníbal Suárez (22) y Gonzalo Domínguez (14); y del “homicidio doblemente agravado en grado de tentativa” de Rocío, la adolescente de 13 años que viajaba con los fallecidos, que resultó gravemente herida pero fue dada de alta hace pocos días.

Por otro lado, el subcomisario Franco Micucci; el teniente Héctor Enrique Ángel; el oficial inspector José Manuel Durán; la oficial subayudante Nadia Genaro, la oficial Melina Blanco y el oficial subinspector José Alfredo Domínguez, seguirán detenidos por “encubrimiento y falsedad ideológica”.

Este grupo de efectivos, según se informó, llegó después del choque y «realizó una serie de maniobras que tuvieron como fin hacer pasar el hecho como un accidente de tránsito».

El último detenido es el exsecretario de Seguridad de la Municipalidad de Monte, Claudio Martínez. El exfuncionario se lo acusa de que intentó ocultar las imágenes de las cámaras de seguridad que registraron parte de la persecución, sobretodo una en que se ve a unos de los policías sacar el cuerpo por la ventanilla para, presuntamente, disparar.