El gobierno nacional busca acoplarse a la disciplina fiscal impuesta por los técnicos del FMI para reducir el déficit fiscal, y a través de decretos acordados se suspendió por 6 meses la baja pautada en la alícuota de retenciones a las exportaciones de harina y aceite de soja.

Asimismo eliminó el Fondo Federal Solidario que asignaba a provincias y municipios el 30 por ciento de los derechos de exportación al complejo sojero; y redujo a la tercera parte el total pagado a exportadores por reintegros. Con estas medidas, el Ejecutivo aspira a reducir el desequilibrio fiscal de este año en 12.500 millones de pesos y durante 2019, en 53.000 millones, según estimó el Ministerio de Hacienda.

De esta manera, en concordancia con las políticas de estabilización financiera acordada con el FMI se profundiza el ajuste, se condiciona la producción y el consumo, acompañado de un contexto de recesión que va de la mano de una política estatal que no puede controlar la fuga de capitales y reducir el déficit fiscal.

El contenido de las medidas dispuestas para el ahorro fiscal fueron los siguientes:

  • Reintegros a la exportación

La reforma tributaria y el pacto fiscal, que reducen los impuestos al cheque y a los ingresos brutos de acuerdo a un esquema de diferencia por producto. “Los reintegros a la exportación (explica el Ministerio de Hacienda en su comunicado) justifican su existencia en la vigencia de impuestos indirectos que se acumulan durante el proceso de producción y que no tienen una devolución al exportarse.  (tributo cobrado por las jurisdicciones provinciales) generan el espacio para que dichos reintegros puedan ser reducidos. Asi, se reduce en un 66 por ciento el monto total pagado en concepto de reintegros a la exportación, de acuerdo a un esquema diferencial por producto.

  • Derechos de exportación a la soja

Se mantiene la baja prevista en la alícuota de los granos y se suspende por seis meses la baja establecida para aceites y harinas. “Las alícuotas a la soja de vienen reduciendo de forma sostenida, desde el 35 por ciento en 2015 para el poroto de soja al 26 por ciento actual, previendo su convergencia al 18 por ciento en diciembre de 2019”, apunta el comunicado de la cartera de Nicolás Dujovne. Los ingresos adicionales por esta medida son de 1500 millones de pesos en 2018 y 12.000 millones en 2019.  “En cuanto al aceite y las harinas –agrega—, la alícuota se redujo desde el 32 por ciento en 2015 al 23 por ciento actual y también convergerá al 18 por ciento en diciembre de 2019″.

  • Fondo Federal Solidario

Con la política de ahorro fiscal se elimina el mecanismo de compensación del Fondo a través del cual se transfería a las provincias y los municipios el 30% de los derechos de la recaudación de la soja. “El ahorro fiscal para la Nación es de 8500 millones de pesos en 2018 y 26.500 millones en 2019”, sostiene Hacienda. Con la eliminación del Fondo Federal Solidario, la provincia dejará de percibir 1638 millones de pesos que recibió hasta 2017”. Para provincias y municipios, este recorte puede ser un detonante social condicionante y vital que se le escapa al radar del gobierno nacional.

Bajo la prioridad del orden fiscal y la política de suspensión de la quita de retenciones a la harina y el aceite de soja, se mantiene la rebaja pautada al grano, también afectara a la provincia de Santa Fe, en la cual están radicadas las mayores firmas aceiteras y molineras del país. La medida es calificada como “desindustrializadora” al mantener el gravamen al producto procesado mientras se reduce sobre la materia prima.