Con una multitud calculada en las 350 mil personas, según estimaron los organizadores, las CGT y las CTA hicieron la primera marcha contra las medidas del gobierno de Mauricio Macri y los despidos incesantes que se producen desde hace cuatro meses.
Como estaba previsto, el acto comenzó pasadas las 15, en el escenario montado en la intersección de las avenidas Colón e Independencia. Para esa hora un sinfín de organizaciones gremiales copaban Independencia hasta la 9 de Julio, así como Colón en ambos sentidos. Previo a los discursos se leyó un comunicado en el que se aclaró el apoyo a la ley de Emergencia Ocupacional. Además, se reiteraron los reclamos sobre el impuesto a las Ganancias y por el 82% móvil para los jubilados.
La frase «la unidad nos da la fuerza, la solidaridad la cohesión» se leía en el escenario que estaba escoltado a los laterales con la figura de Perón y Evita.
El primero en hablar fue Pablo Micheli. El líder de la CTA Autónoma, hizo foco en la necesidad de que se aprueba la Ley antidespidos. «Si el Gobierno veta la ley de emergencia laboral va a haber conflicto, porque vamos a agudizar la lucha y si no escuchan habrá paro también», avisó y cerró el discurso anticipando que podría haber un paro de no cumplirse las demandas.
En la misma línea, el titular de la CTA de los Argentinos, Hugo Yasky, afirmó que las centrales obreras irán «al Congreso nacional para que los diputados voten la ley antidespidos. Y si Mauricio Macri la veta, que sepa que vamos a salir a las calles a pelear».
En tercer lugar habló el titular de la CGT Alsina, Antonio Caló, quien anunció ante el público presente la unificación de las dos CGT para el próximo 22 de agosto. El además titular de la UOM aclaró que esta unificación se hubiera dado igual si las elecciones nacionales las ganaba Daniel Scioli.
Por último, habló Hugo Moyano. El titular de la CGT Azopardo cerró el acto y fue el que habló más extenso. Una multitud vitoreó su nombre cuando se aproximó al estrado. El secretario adjunto de los camioneros confesó estar «nervioso» por la «cantidad de compañeros presentes».
El acto despega a Moyano de las políticas de Macri, a quien lo criticó sobre todo por ni siquiera «consultarnos» las medidas. Al tiempo que recordó que desde que Cambiemos está en el poder, ha demorado mucho en tomar medidas a favor de los trabajadores y muy poco en hacer medidas que favorezcan a los empresarios.
«Esto no es un acto en contra del Gobierno, es un acto a favor de los trabajadores. Pero al que se ponga en frente de los trabajadores lo vamos a enfrentar. Esto va a ser así, porque históricamente ha ocurrido con el movimiento obrero», advirtió Moyano en medio de aplausos.
«El Gobierno tiene que respetar los reclamos de los trabajadores porque no son caprichos, son realidades. El Gobierno tiene que entender que tiene que pensar en el sector mas débil de la sociedad», dijo Moyano.
Por primera vez las CGTs y las CTAs se juntaron en un claro mensaje de unidad. En estos días se sabrá si el oficialismo recibe el mensaje.