(Publicación pedida)

Ante el gravísimo embate judicial contra dirigentes opositores que cuestionan un modelo de ajuste y endeudamiento, es necesario expresar el más enérgico rechazo.
Nada es casualidad.
Cuando empieza a tomar volumen un fuerte rechazo de la sociedad a las nuevas políticas fiscales y a la reforma previsional que vulnera derechos y conquistas, el Poder Judicial intenta correr el eje de la preocupación de los jubilados y trabajadores y, a su vez, mandar fuertísimas señales de amedrentamiento contra la oposición.
Fueron dos años de ajuste que luego de las elecciones legislativas se vuelve a profundizar mediante el plan de reforma previsional, flexibilización laboral y nuevos tarifazos de gas, luz y combustibles. Esta serie de medidas planificadas estratégicamente por el Gobierno no hacen más que vulnerar y perjudicar cada vez más al pueblo trabajador.
Empieza a no ser suficiente el poder de los grandes medios, ya no alcanza con el argumento de la «herencia recibida». Con la herencia recibida los jubilados, los trabajadores, los más humildes vivían más dignamente; con el «cambio» perdieron y van a perder mucho más derechos. No alcanza con que sostengan la fábula de que los jubilados «pierden plata pero no pierden poder adquisitivo».
Al gobierno se le empieza a terminar la excusa de la pesada herencia y aplica otras metodologías. Entonces el Partido Judicial, sale a hacer sus deberes y avanza con la persecución política para buscar el disciplinamiento de la oposición, y si es necesario, las Fuerzas del Orden garantizarán el disciplinamiento social.
Ante este contexto político, económico y social ¿Qué podemos y debemos hacer los peronistas? No callarnos la boca y cumplir con nuestro rol de oposición que nos encomendó un sector importantísimo de la sociedad.

Mauricio Barrientos
Diputado Provincial