Hace ya bastante tiempo circulaba por nuestra ciudad un vendedor ambulante llamado Nahuel. El joven, proveniente de Ituzaingó, recorría barrios y plazas vendiendo churros clásicos, con dulce de leche y bañados en chocolate.

Pero Nahuel ahora no podrá seguir trabajando. ¿La razón? La autoridades municipales se lo prohibieron en virtud de una ordenanza municipal que prohíbe la venta ambulante.

«Yo sé que no tenía los papeles, entonces me dijeron que tenía que acercarme a la Municipalidad a hacer los papeles. Pero cuando nos acercamos nos dijeron que estaba prohibida la venta ambulante», contó Nahuel al diario local Cuatro Palabras.

Además manifestó, «Quedaron muchos clientes colgados, pero bueno, no es por culpa mía, está prohibida la venta ambulante».

Asimismo dejó en claro que la churrería sigue en la Av. Lamadrid, «pero yo no estoy trabajando más, porque al sacarme lo de la venta en la calle, ya no me necesitaban», expresó. Y agregó que los dueños están moviéndose para regularizar la situación pero hasta entonces no puede vender en la calle.

Muchos vecinos se solidarizaron y se quejaron por la situación que está pasando el muchacho. Entre ellos el ex-concejal Hugo Moro, que presentó un expediente en el Concejo Deliberante para que Nahuel pueda volver a realizar su anterior trabajo vendiendo churros, ya que se consideró responsable por ser autor de una modificación a la ordenanza.

Según explicó el ex-concejal Cambiemos «no comprendió el espíritu de la ordenanza». En su opinión, si se siguiera esta aplicación de la norma no podrían trabajar ni el heladero ni el sodero.