Aparentemente, a Gendarmería y el gobierno no le ha sido suficiente verse involucrados en un hecho de semejante delicadeza como es la desaparición y muerte de Santiago Maldonado, sino que incluso ahora se dedica también a hostigar a la prensa mientras trabaja.
Durante las elecciones primarias de agosto, nuestro medio de comunicación tuvo inconvenientes con un gendarme que sin identificarse y sin mediar explicación echó de mala manera a un miembro de este equipo que intentaba cubrir la votación de la candidata de Unidad Ciudadana Ruth Williams.
El triste episodio se repite esta mañana cuando nuevamente un gendarme impide que la prensa realice su tarea informativa. Esta vez sucedió en la Escuela Primaria 4, cuando el gendarme le pidió que se retire cuando estaba desarrollando su tarea invocando que no se puede tomar imágenes de ningún tipo dentro de las escuelas, algo que cualquiera sabe no es cierto.
Horrible actitud la de Gendarmería en nuestra ciudad y en nuestro país, que no colabora en la construcción de una sociedad pacífica.