La línea ferroviaria que corre habitualmente entre las terminales Once y Moreno se encuentra paralizada por una huelga de 24 horas que comenzó a la medianoche en rechazo a la suspensión de 70 trabajadores de limpieza del depósito de Castelar.

La medida de fuerza fue convocada por el sector que responde al dirigente Rubén “Pollo” Sobrero.

Según indicó el Secretario de Prensa de la seccional Gran Buenos Aires de los delegados de la Unión Ferroviaria (UF), Gustavo Ibáñez, los empleados de limpieza fueron sancionados por «el solo hecho de reclamar mejores condiciones de seguridad».

Sin embargo, la empresa Trenes Argentinos Operaciones señaló que la sanción fue porque “aplicaron un paro de actividades arbitrario y sin sustento el 24 de junio».

La huelga afectará a unos 350 mil pasajeros que utilizan a diario la línea Sarmiento.