Luego de que se reconociera esta semana el faltante de manteca en las góndolas de los supermercados, producto de la crisis de los tambos, el presidente de la Federación Panaderil de Buenos Aires, Emilio Majori, se refirió a la suba en el precio de las medialunas y dijo que es consecuencia del «aumento de la materia grasa y del tarifazo en los servicios públicos».
Majori sostuvo que según calculan, las facturas salen entre $ 50 y $ 110 en los barrios más pudientes y que una medialuna sale diez pesos.
Al efecto, manifestó:
«Lamentablemente no quisiéramos estar en esta situación. Toda la materia grasa sufrió un fuerte aumento, no sólo la manteca».
En ese sentido, dijo que una panadería de Lanús pagaba $ 5.000 y le vino $ 37.000 de luz por lo que tuvieron que realizar planes de pago.
Asimismo, dijo que el problema no es solo el tarifazo sino las largas colas para hacer los reclamos ante las empresas que prestan servicio.