En la tarde de este miércoles el Senado aprobó por unanimidad y giró a la Cámara de Diputados un proyecto de ley que establece que todos los ciudadanos mayores de edad serán donantes a menos que manifiesten su voluntad de no serlo.

En el marco del Día Nacional de la Donación de órganos, la norma fue aprobada con 68 votos y enviada a la Cámara baja para su sanción definitiva. La llamada «Ley Justina» homenajea a la niña de 12 años que falleció el año pasado por no recibir un trasplante de corazón a tiempo.

El senador Juan Carlos Marino quien presentó el proyecto impulsado por los padres de Justina Lo Cane, consideró que «esta es una ley que va a dar un cambio de paradigma«, porque «Argentina se va a convertir en un país líder en América en lo que tiene que ver con la donación de órganos».

«Esto nace desde el dolor más profundo, que es perder una hija. Ella nos dejó una enseñanza, previendo el final, cuando le dijo a su papá «hagan lo que puedan por los demás«. Los padres no se encerraron en el dolor y el luto, lo transformaron en esperanza, en solidaridad», agregó.

El proyecto señala que «podrá realizarse la ablación de órganos y/o tejidos a toda persona capaz mayor de 18 años que no haya dejado constancia expresa de oposición a que después de su muerte se realice la extracción de los mismos».

«Actualmente, entre el 25% y el 35% de las personas que esperan un trasplante mueren sin obtenerlo, y solo el 10% de quienes están en lista de espera se trasplantan al año», dijo Ezequiel Lo Cane, papá de Justina.