El directorio del Banco Central aprobará en breve la utilización de aplicaciones para que los consumidores puedan abrir cuentas bancarias y depositar cheques desde los teléfonos celulares inteligentes, llamados smartphones, en el marco de la estrategia de digitalización del sistema financiero.

El titular de dicha entidad, Federico Sturenegger, indicó al respecto:

«Ya no se deberán llevar más los cheques a una sucursal, siendo suficiente que puedan enviarse simplemente mediante una foto desde el celular».

Estas medidas a tomar, se definen después que se agilizó el trámite de aprobación de sucursales, se estimuló la creación de agencias móviles, y dependencias automatizadas «para lograr una mayor inclusión financiera en aquellas regiones donde se torna más complicado la instalación de sucursales bancarias propiamente dichas».

También recordó que la entidad flexibilizó la normativa para los transportadores de valores, la extensión del período para el cierre obligatorio de cuentas y otras medidas para minimizar los costos del sector y estimular la competencia.

Estas medidas se enmarcan en la visión del directorio de que el futuro es un «mundo sin efectivo», dijo el funcionario para considerar que en unos años los billetes serán recordados «como hoy recodamos a aquellos mercaderes que usaban la sal para hacer sus transacciones».

En cuanto a la aprobación del depósito de cheques vía smartphones, uno de los casos ya implementados en el país es el del banco de Santa Fe, que desarrolló la aplicación Santa Fe PayCheck.

En este caso, después de iniciar la sesión con un usuario y contraseña, el cliente saca una foto al cheque con la cámara del mismo smartphone, la aplicación decodifica la imagen y el usuario sólo tiene que completar los datos de la cuenta destino de los fondos en cuestión.

 

Por otro lado, el funcionario señaló que «nuestro sistema financiero es de los más pequeños de la región», y remarcó que los depósitos del sector privado en Argentina representan 15%, mientras que en Chile, equivalen al 57%; en Brasil a 62%; en Bolivia, 65%.

 

Por eso, y finalizando, consideró que «hay que despertarse y darse cuenta que ahí está la oportunidad de crecimiento del sector», remarcando que las entidades tienen que competir para captar el ahorro que está afuera del sistema.