El Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad de Avellaneda (UNDAV), reveló mediante un informe que la canasta de bienes y servicios de las vacaciones de verano aumentó un 57,2% promedio. En el documento se detallan los incrementos de precios en los productos de consumo y entretenimiento veraniego.

Entre los principales rubros que componen dicha canasta se destaca el incremento en cenar afuera (59%), uso de piletas (57%), camping (55,1%), teatro (54,6%), videojuegos (53,2%), e ir al cine (52,9%).

«Si bien los datos estadísticos confirman una fuerte contracción de la economía, los precios de los pasajes de transporte, combustibles, alquileres, hoteles, restaurantes y espectáculos lucen aumentos» detalla el informe.

En el documento se detallaron tres tipos de canastas, una «gasolera» que incluye pasajes en micros semi cama, alquilar un departamento por siete días, comidas y salidas recreativas para una familia formada por dos adultos y dos menores. En la ciudad de Mar del Plata, el valor estimado de estas vacaciones sería de 60.129 pesos, en Córdoba 57.519 pesos y en Mendoza 59.063 pesos.

La canasta vacacional «selectiva» incluye pasajes en micro cama y alquiler por siete días en una cabaña. En esta ocasión, el costo aproximado que tendría una familia al vacacionar en Mar del Plata sería de 73.083 pesos, en Córdoba 67.976 pesos y en Mendoza 68.314 pesos. La comparación interanual muestra una suba promedio del 57.6 por ciento.

Por su parte, la «canasta premium» cuenta con pasajes en avión y un hotel 4 estrellas. El costo para una familia es de 82.035 pesos para Mar del Plata, 78.959 pesos para Córdoba y 77.809 pesos para la ciudad de Mendoza. Desde 2015, el incremento acumulado promedio para las tres canastas es del 330 por ciento.

Por último, el informe de la UNDAV expone que para un trabajador medio, tomarse vacaciones de verano junto a su familia equivaldría al 139,6 por ciento de su salario. «Mientras que en 2015 una canasta vacacional estándar equivaldría al 101 por ciento de un salario promedio, en 2018 esta cifra escaló a 129 por ciento, y en la actualidad ya trepó al 140 por ciento.»