Recientemente se conoció que el gobierno aprobó la comercialización de productos primarios originados a partir de semillas genéticamente modificadas, conocidas como transgénicas.

El tema es bien controvertido y las posiciones son muchas. La Posta dialogó con José Luis Tedesco, ingeniero agrónomo y vicepresidente de AAPRESID (Asociación Argentina de Productores en Siembra Directa) quien explicó que un transgénico no afecta por sí mismo a la salud y se manifestó a favor de la iniciativa.

Para Tedesco, muchas personas no saben qué es un «alimento transgénico» y dijo que incluso a esas personas les preocupa consumirlos «sin saber que ya los consumen».

Mejoramiento genético y trangénesis

«Cuando vos hablás de transgénesis, es una técnica de mejoramiento genético«, dijo. Y agregó, «el mejoramiento genético se hace desde que el hombre existe, desde que el hombre descubrió la agricultura».

Y contó que «hace 10 mil años más o menos, en el neolítico, cuando empieza la agricultura, el hombre para empezar a cultivar tuvo que elegir, hacer selección«, una selección artificial, basada en la percepción de cuáles eran los mejores frutos del suelo, que decidiía guardarlos para reproducirlos en la siguiente temporada.

La primera planta que se domesticó fue el trigo, «había trigo que tenía un grano pequeño y del que no podían sacar harina ni nada y otros granos que sí, que sacaban una mejor harina».

«Entonces el ser humano fue eligiendo ese trigo y al otro lo descartó, es más se perdió el otro trigo«, expresó y explicó, «lo que fue seleccionando el ser humano fue un ‘pool’ de genes».

El cambio genético se dio en las semillas también por la diferencia climática, además del paso del tiempo. Por ejemplo, dijo, el trigo que se cosecha en Argentina es distinto al trigo europeo o estadounidense, ya que no requiere el mismo frío y acá tenemos un clima más bien templado.

«Cambió cómo se selecciona»

«Lo que cambió cuando apareció la transgénesis es cómo se selecciona«, y, donde más se nota esta selección es en horticultura: «hay un montón de especies u hortalizas que nosotros hoy consumimos, que fueron mutaciones espontáneas». Hoy en día «la mayor parte de las hortalizas que consumimos son mutaciones de otras plantas de hace muchísimos años y que se fueron diversificando».

«Cuando apareció el transgénico fue tomar un gen que existía en algún organismo vivo y ponerlo en un vegetal que nos interesaba. Eso es un transgénico«. «Se tomaba el gen de una especie que ya se conocía y se introducía en otra», detalló el ingeniero Tedesco.

Un caso emblemático, explicó Tedesco, fue el de la insulina. «A fines de los 70, principio de los 80, pudieron, por genes recombinantes, producir insulina idéntica a la insulina humana. Antes se usaba la insulina de cerdo, a partir de esos genes recombinantes lograron producir insulina idéntica a la humana por microorganismos, que no la produce el ser humano».

Otro de estos casos fue el de la soja con resistencia al glifosato, la famosa soja RR. Luego de varios estudios, encontraron un microorganismo, una bacteria del suelo, que tenía el gen para que el glifosato no interrumpa la vía metabólica. «De esa bacteria tomaron una parte del genoma y se la introdujeron a la soja«, expresó.

«Cuando aparece esa tecnología, permitió generar mucho mejor el cultivo de soja». Y afirmó, «realmente fue revolucionario«. Antes de esto, explicó, había que aplicarle al suelo demasiados herbicidas, mientras que luego de esto con un solo herbicida bastaba.

«Se abusó de esa tecnología»

«Se abusó de esa tecnología, eso fue lo que pasó». De manera que «empezaron a aparecer malezas que resistían más que el glifosato, porque la naturaleza funciona de esa manera«.

«Si vos usás siempre un mismo método de control, en algún momento va a aparecer un individuo que resiste ese método», consignó.

Por lo que explicó que quien siembra un maíz con resistencia a determinada plaga, debe también sembrar el que no tiene resistencia en una proporción que ronde el 10-12%.

«De esa manera lográs que la plaga que es vulnerable, susceptible, al evento biotecnológico que estás usando consuma de ese maíz que no tiene el gen y de esa manera lográs mantener y sostener a esa plaga», detalló Tedesco y agregó que «si vos usas todo el maíz con la resistencia a una determinada plaga, en un momento va a aparecer la plaga que se va a volver resistente a ese maíz».

Polémica por «alimentos transgénicos»

Acerca de la resistencia de muchas personas a aprobar este tipo  de procedimientos, Tedesco expresó, «esto es lo que generó ruido, un gen de una especie que se introdujo en un gen de otra especie«.

Sin embargo, desde su perspectiva con la transgénesis «se evita el uso de químicos», y los que se usan, se los administra de una manera adecuada, «ecológica».

Decualquier manera, insitió Tedesco, «ya el transgénico está superado, hoy hay otras técnicas mucho más modernas que la transgénesis«.

«Hoy se trabaja en edición génica. La edición génica es como cuando vos editás un archivo, lo corregís en algún punto, lo cerrás y cumple su función, esto es parecido. Vos abrís el genoma, modificás, lo volvés a cerrar y dejás que haga su evolución para crecimiento y demás», ejemplificó.

En ese marco destacó el avance que permite «tener una lectura de todo el genoma y poder saber qué estás produciendo». «Hoy los laboratorios tienen la posibilidad de estudiar qué pasa con los genes y asegurarse que la planta no produzca tóxicos o algún producto dañino a la salud», especificó.

«Entonces tenés muchas más garantías y seguridad en un producto editado genéticamente que en un producto que no sabés«, afirmó.

«En la edición génica se hace una mutación controlada», señaló, «hoy podríamos decir que un alimento proveniente de un organismo editado genéticamente es más seguro que uno que no está editado».

Desde este punto de vista, para Tedesco la desconfianza de la gente «tiene que ver con el desconocimiento» sobre el tema, «porque no conocen, porque no saben qué es«.

Productos etiquetados

Otra discusión derivada de la aprobación de este tipo de cultivos es la identificación de este tipo de modificación. Algunas organizaciones ambientalistas exigen que debiera existir en Argentina una ley que obligue a identificar este tipo de productos para que quien quiera no consumirlos pueda saberlo.

Al respecto, Tedesco manifestó a La Posta «eso va a depender de la percepción que tenga el consumidor. A mí no me preocupa que esté etiquetado«. «Hay países o consumidores que van a requerir etiquetado, pero la verdad en mi caso a mí no me preocupa», consignó.

La tranquilidad, graficó Tedesco es porque «una empresa X que va a lanzar un organismo genéticamente modificado al mercado, se asegura que ese genoma o en la modificación no haya nada dañino, sino la demanda puede venir contra ellos«.

«Hoy estamos consumiendo alimentos sanos y seguros, no tengo duda», consignó y agregó, «es totalmente saludable comer alimentos transgénicos».

Para finalizar manifestó, «la realidad es que no se ha encontrado nada perjudicial, todo lo contrario«.

2 Comentarios

  1. Excelente nota al Ing. Tedesco, muy claras y didácticas sus palabras. Debemos desideologizar el tema de los transgenico y dejar de verlos como que nos vamos a volver zoombies si los consumimos. Son tan o mas saludables que el resto. Cuando veo en television las propagandas de que un famoso INSECTICIDA de una emblematica marca americana, nos dice que cuida a los niños, pienso lo loco de esto, tratamos de veneno a los transgénicos y publicitamos los venenosos insecticidas domésticos, y solo por una cuestión ideologica, ya que no hay absolutamente nada comprobable que indique que no sean inofensivos. Mis felicitaciones al Ing. Tedesco y a La Posta.

  2. Muy buena nota…ademas de darme el pie para reconocer a un gran colega como es el queridoTano como orgullosamente lo conocemos aquellos que compartimos
    la Facu,es importante que de la mano de los Ing Agr generemos ese puente entre la sociedad y el conocimiento..no solo es importante si no nuestro deber…es hora que cambiemos el paradigma productivo y el miedo por el conocimiento!!!