El vicepresidente tercero de la Unión Industrial Argentina (UIA), Guillermo Moretti, habló sobre la sitaución que vive el país y el rumbo político-económico.

«Tendremos que ver cómo aguantamos, cómo esperamos, cuánto aguanta la sociedad. La salida es cambiar este modelo. Esto es la realidad. Ahora, si la sociedad quiere suicidarse seguirá con este modelo», dijo el también presidente de la Federación de Industriales de Santa Fe (Fisfe).

Según Moretti, el modelo económico que está desarrollando la administración de Mauricio Macri «no solo no contempla al sector industrial sino también a muchos sectores de la sociedad que quedan afuera».

En ese sentido, dijo que como el Gobierno fue electo por la sociedad tendrá que terminar su mandato y «luego se verá cómo sigue esto en las próximas elecciones», porque hoy la situación «es muy, muy complicada y están cerrando empresas».

El empresario consideró en declaraciones a la radio AM 530 que «hay un fanatismo ideológico» en un grupo de personas para justificar las políticas impuestas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), lo cual ocurre no solo en la Argentina sino también en el mundo.

En esa línea, Moretti señaló que los países que fueron a déficit cero por orden del FMI tras la crisis mundial del 2008 terminaron como Italia, España y Grecia, endeudados y con la economía quebrada; mientras que otros como Estados Unidos e Inglaterra «resurgieron» impulsando su mercado interno.

Moretti reveló que la llegada de Dante Sica al ministerio de Producción había generado «expectativas en algunos empresarios» pero no en otros, dado que se sabía «que el modelo económico no lo iba a manejar él».

«Tengo mucho respecto por Dante, pero en la primera reunión ocho días después de su asunción dijo que la tasa -que estaba en 38%- iba a ir a la baja en 45 días. Dos semanas después, la tasa saltó al 73% y hoy está aún por encima del 60%», dijo Moretti.

El empresario advirtió que las tasas del 65% como las actuales son «de quiebre para cualquier empresa y cualquier persona» y precisó que las pymes están pagando tasas superiores al 90%.