El nuevo intendente de Chacabuco Darío Golía, asumirá un tercer mandato el 10 de diciembre. Arrasó en la elección y se convirtió en el primer intendente del distrito en lograr un tercer mandato. El actual intendente se va con una imagen bajísima y no hay dudas que Golía es quien logró representar mejor a los chacabuquenses que rechazaron la gestión del intendente cambiemita Víctor Aiola. En cambio, el peronismo local reconstruyó su capacidad electoral. La victoria también se entrelaza con la de Axel Kicillof que hizo de su contundente triunfo el motor de la sorpresa de Sergio Massa, que ganó la elección nacional contra todo pronóstico. En la campaña de Massa tuvo un destacado rol el chacabuquense Julián Domínguez y en la de Axel Kicillof la diputada provincial Micaela Olivetto que lo acompaña en toda la Cuarta Sección.
Cuando asumió su primer mandato, en 2003, Golía fue candidato por el Partido Justicialista y sacó 11.714 votos, el 45,06%. Aquella etapa primera estuvo marcada por la reconstrucción del Estado municipal, al igual que lo realizó Néstor Kirchner a nivel nacional. Golía, que sucedió en el cargo al exintendente radical, Héctor Recalde, contó en alguna oportunidad el estado deplorable de las arcas municipales al asumir. Recalde había sido electo intendente en 1999 en la misma boleta que Fernando de la Rúa, el presidente que renunció. Era una época donde el hospital no tenía insumos de trabajo.
Golía gobernó sin mayores problemas y con acompañamiento en el Concejo Deliberante, donde tejió alianzas con otros sectores que le aportaron gobernabilidad. Su gestión tuvo un perfil productivo en consonancia con el gobierno de Kirchner donde la economía crecía a pasos agigantados y los salarios ganaban poder de compra.
En 2005, elecciones intermedias legislativas, fue de internas para el nuevo peronismo que rearmaba Kirchner. En el Partido Justicialista, y con el viejo sistema de internas, confrontaron electoralmente el sector de Duhalde que presentó a Hilda ‘Chiche’ Duhalde y el sector oficialista que presentó a Cristina Fernández. La conducción quedó en manos del kirchnerismo. En Chacabuco, la lista de concejales obtuvo 11.218 votos, el 43,78%.
En 2007 Golía reeligió obteniendo 14.374 votos, equivalentes al 53,84% de los sufragios. Su segundo mandato coincidió con el primero de Cristina Fernández de Kirchner. La obra pública cumple un rol preponderante en el mandato de Golía, siendo una gran dinamizadora de la economía local. La oposición política nacional intensifica la confrontación política. La crisis política que se abrió tras la Resolución 125, del año 2008, que instalaba retenciones móviles impactó seriamente en las localidades del interior.
Como parte de la confrontación social que vivió el país en aquella época, el intendente y diferentes funcionarios fueron víctimas de episodios de intimidación pública a las autoridades locales como en casi todos los municipios. Pero también es cierto que el conductor del peronismo local y exintendente Julián Domínguez fue designado como ministro de Ganadería Pesaca y Agricultura, en 2009 como parte de la respueta que el gobierno de Cristina Ferández elaboró para salir de la crisis. La tarea fue cumplida por Domínguez exitosamente por Domínguez que se mantuvo en el cargo hasta 2011.
En 2009 las elecciones marcaron la derrota electoral del peronismo. Las ganó el PRO con Francisco de Narváez a nivel nacional. En Chacabuco, sin embargo, el triunfo fue contundente para la lista oficialista con 12.471 votos (43,92%) a nivel local. En aquella campaña, Néstor Kirchner visitó Chacabuco junto al gobernador Daniel Scioli. El acto fue en el gimnasio del Club Porteño. Al año siguiente, en 2010, Néstor Kirchner falleció.
En 2011 Golía, dejó la municipalidad por ser electo diputado provincial por la Cuarta Sección. El conductor del peronismo chacabuquense, Julián Domínguez fue elegido diputado nacional y posteriormente presidente de la Cámara de Diputados. El candidato a intendente que en esa elección representó al peronismo (Frente Para la Victoria) fue Mauricio Barrientos, que había sido presidente del Concejo Deliberante durante la intendencia de Golía. Una decisión que no tuvo el consenso de todo el arco peronista. En la categoría intendente Barrientos obtuvo 16.575 votos, el 56,04%. Alta cifra traccionada por Cristina Kirchner que fue reelecta.
En las elecciones de 2015 aceptó ser el candidato local del peronismo local que por entonces atravesaba un proceso de diferencias internas. Golía perdió aquellas elecciones frente a Víctor Aiola, que fue electo intendente por Cambiemos en la misma boleta que Mauricio Macri y María Eugenia Vidal. Aiola cosechó mil votos más que Golía, 15.164, el 47,24%. Golía sacó 14.171 votos, un 44,15%.
El intendente Aiola asumió en una situación de fervor por derrotar al peronismo y comenzó una prédica en contra de los dirigentes del peronismo y realizó denuncias penales contra los exintendentes Golía y Barrientos, que luego se demostraron falsas.
La confrontación de parte del intendente de la coalición de la UCR y el PRO fue en aumento. Ganó las elecciones de 2017 con un altísimo porcentaje, boleta que localmente encabezó Rodolfo Serritella con 16.665 votos, un 52%. Aquel proceso solo se detuvo porque en 2019, poco antes de la pandemia, el propio Aiola debió declarar a la municipalidad en emergencia económica. La gestión evidenció serios problemas internos.
En las elecciones de 2017 Golía se eximió de participar y en 2019 no estuvo entre los precandidatos que compitieron por el Frente de Todos en las primarias. En aquel año fueron precandidatos Martín Carnaghi y Ricardo Ciminelli. Este último fue quien enfrentó a Aiola en las generales pero no pudo derrotarlo. Aiola cosechó en esa elección la asombrosa suma de 18.379 votos, a 10 puntos porcentuales de Ricardo Ciminelli gracias a la operatoria del corte de boleta. En esa elección Kicillof y Alberto Fernández llegaron al gobierno. En esa misma boleta ingresó al parlamento provincial Micaela Olivetto.
Al asumir el gobierno de Alberto Ferández, Golía fue convocado por Sergio Massa para trabajar en el ámbito del Ministerio de Transporte que ocupó el juninense Mario Meoni. Fue designado vicepresidente de Trenes Argentinos. También fue designado entonces Hugo Moro, exfuncionario de Golía y represente local del Frente Renovador de Sergio Massa.
Golía encabezó la nómina de concejales peronistas en 2021 y accedió al concejo deliberante, cargo que ya había ocupado antes de ser intendente por primera vez. En esta elección el peronismo quedó segundo a solo 8 votos (14.104 a 14.112), pero Golía emprendió desde el momento en que asumió la banca un constante trabajo de recorrer Chacabuco y comunicar su mirada de la política. Si bien el gobierno municipal ganó la elección, de alguna forma fue una derrota porque el poder electoral del peronismo se había recontruido.
En el 2023 fue el precandidato más votado en las primarias abiertas que mantuvo con Martín Carnaghi. En las elecciones generales de este 22 de octubre Golía ganó con 16.065 votos, equivalentes al 48,74% por ciento de los votos, venciendo al candidato a intendente local Alejo Pérez que compartía la boleta de Juntos con Patricia Bullrich.