El gobierno nacional no ha conseguido generar confianza en el mercado. Luego de una quieta jornada del lunes, ayer martes comenzó un nuevo fenómeno, muy relacionado al cepo.

Por un lado la aparición del dólar «blue» es decir, un dolar no oficial que se vende en las cuevas del microcentro porteño en negro. Esa cotización muy informal llegó hasta los $65.

Por el otro, como el gobierno aseguró que los ahorristas pueden disponer de sus dólares, aumentó en los últimos días el retiro de depósitos, lo cual produjo una sustancial merma de las reservas.

Pero además, la principal nota de la jornada del martes fue que los bonos y acciones que cotizan en MerVal cayeron estrepitosamente. Estuvieron lideradas por la caída de los bancos y las energéticas. En el caso, por ejemplo, del Banco Galicia llegaron a perder un tercio del valor comercial, lo que también grafica la falta de confianza también con las entidades bancarias.

La caída de acciones y bonos tomó por sorpresa a los operadores de bolsas, ya que se esperaba que ante la imposibilidad de comprar grandes cantidades de dólares las inversiones serían en bonos. Mal cálculo.

Pero ahora el principal problema que se le presenta al gobierno es que no logró contener la presión cambiaria, y que el mal que pretendió eliminar al reinstalar el cepo terminó por crear ansiedad en los ahorristas en dólares que realizan retiros masivos.

Ayer solamente el Banco Central debió desprenderse de 990 millones de dólares, no solo por venta de dólares, sino principalmente por retiro de depósitos en dólares.

Desde la vigencia del control de cambios las reservas disminuyeron en 1949 millones y el monto se eleva a 16.612 millones desde mediados de julio.

No hay registros acabados en materia de retiros, el último dato disponible es del 29 de agosto cuando se retiraron 805 millones.